El MAC acoge la visión de 25 artistas sobre el monumentalismo

Rodri García A CORUÑA / LA VOZ

CULTURA

PACO RODRÍGUEZ

En esta muestra de vanguardias del siglo XX, consagrados como Malevich o Serra comparten espacio con otros noveles

18 dic 2015 . Actualizado a las 20:38 h.

Tienen en común que son artistas «que trabajan frente a la historia en la idea de lo que es un monumento». Esto explicaba en la mañana de ayer Álvaro Negro (Lalín, 1973), mientras ultimaba detalles del montaje de la exposición Narrativas monumentales: figuras, paisajes y rituales. En ella participan 25 autores y desde anoche sus 31 obras e instalaciones pueden verse en el Museo de Arte Contemporánea de Gas Natural Fenosa, MAC, de A Coruña. «Entre estos artistas hay un cambio generacional desde Malevich, -estamos hablando de vanguardia del siglo XX-, pasando por Barnett Newman como representante de la vanguardia americana, hasta gente aún en activo pero ya veterana como Helmut Federle, un artista suizo del que tenemos dos piezas», detallaba el comisario.

Además, se puede ver «también una pieza de un Manolo Paz que no es el de siempre sino que esta es una obra más minimalista», explicaba. Richard Serra, Elena Asins (fallecida recientemente), el vasco Asier Mendizabal, el portugués Mauro Cerqueira, Jacobo Castellano o Rodríguez-Menéndez son algunos de los autores participantes.

En estas Narrativas monumentales, incidía Negro, «abundan las obras de carácter abstracto que, a pesar de su aspecto minimalista, abren las más variadas perspectivas sobre la temática de la exposición». Esa complejidad es la que pretende manifestarse en el montaje de las obras en los espacios, ya que «algunas precisan de posiciones más periféricas, de un rincón que paradójicamente las hace más visibles porque en su carácter está inscrita cierta intimidad, mientras que otras en cambio buscan un centro y precisan de una posición protagonista en el espacio». Como ejemplo de ello están las dos piezas que son «origen y paradigma de la exposición»: se trata del conjunto escultórico que Ulrich Rückriem instaló en Monteagudo (A Estrada), alrededor de una capilla dedicada a san Blas. Dicho trabajo está compuesto por cuatro piezas de granito que se erigen a modo de un relieve del suelo, un cubo, una estela y una columna que, según Negro, el artista ha vinculado con hechos que tienen lugar en este espacio, como es la procesión alrededor de dicha capilla, el monumento, durante la celebración del santo.

Y es que la idea general de la exposición es la de crear «una genealogía a través de las narrativas monumentales» y por ello las obras reunidas «se han ido seleccionando como en un palimpsesto hasta configurarse como una atmósfera».

Otro aspecto que destaca de este proyecto, y que podrá disfrutarse hasta el 26 de abril, «es la ligazón que hay entre la abstracción más formalista y la espiritualidad». En este sentido señala la obra de Gregor Schneider que quiso reproducir la Kaaba.