El hombre araña más artístico regresa a la gran pantalla

María Estévez LOS ÁNGELES / COLPISA

CULTURA

Fotograma del filme «Spider-Man: cruzando el multiverso».
Fotograma del filme «Spider-Man: cruzando el multiverso». Sony Pictures

Desembarca este viernes en los cines el filme de animación «Spider-Man: cruzando el multiverso»

01 jun 2023 . Actualizado a las 23:08 h.

Dispuesto a superarse a sí mismo, el equipo de directores de Spider-Man: cruzando el multiverso, Kemp Powers, Joaquim dos Santos y Justin Thompson, ha vuelto a hacerlo: ha logrado insuflar vida, y de qué forma, a las viñetas de los cómics del hombre araña. Su predecesora, Spider-Man: un nuevo universo (2018) supuso toda una revolución dentro del panorama de la animación, gracias a un estética rompedora, arriesgada y casi experimental que bebía de todo tipo de fuentes e integraba la animación 2D y 3D a las mil maravillas, convirtiendo la película en una obra de arte ganadora de los premios más importantes, incluidos el Óscar y el Globo de Oro a la mejor película de animación. Con ese éxito, el reto de desarrollar una continuación se antojaba mayúsculo. «Nos dimos cuenta que habíamos conseguido algo distinto y queríamos hacer lo mismo con la secuela. Hemos intentado desarrollar una historia emotiva sin sentirnos atrapados por el éxito de su predecesora», afirma Dos Santos.

Así que nada más poner en marcha la preproducción, dieron libertad a los animadores para probar cosas distintas, tratando de realzar el aspecto más artístico de la nueva aventura. «Con este filme nos hemos quitado los grilletes por completo», afirman. Spider-Man: cruzando el multiverso comienza un año y cuatro meses después de la primera entrega. Miles Morales ha pasado ese tiempo perfeccionando sus habilidades como hombre araña mientras intenta adaptarse a su nueva realidad. Cuando su amiga Gwen, toda una Spider-Woman en su mundo, reaparece a través de un portal interdimensional, Miles se ve envuelto en otra misión para salvar el multiverso. Lo que no se podía imaginar es que otros Spider-Man alternativos le van a poner trabas.

«Gwen se convierte en protagonista de la narración porque las lealtades se van transformando», revela Dos Santos. Powers va más allá: «Es una fugitiva de la ley y la principal sospechosa de la muerte de Peter Parker en su mundo. Ella se encuentra anclada en un dilema, pero la apertura de un portal multidimensional le ofrece la oportunidad de dejar su mundo».

Como en toda película de superhéroes, debe haber un villano y en esta ocasión el honor ha recaído en la Mancha, un tipo algo torpón, capaz de generar portales espaciales. «Lo escogimos por su conexión con Miles. Su origen está muy relacionado con él, lo que lo convierte en el villano perfecto. Es muy simple al principio, pero evoluciona dramáticamente a lo largo de la película, y esa evolución fue emocionante de abordar visualmente y desde el personaje», admite Powers.

Han pasado cuatro años y medio desde la llegada de Un nuevo universo a la pantalla grande. Su apartado artístico incorporaba, por ejemplo, el craquelado de Jack Kirby, la técnica con la que el dibujante trataba de dotar de movimiento las viñetas a la hora de e ilustrar el humo, los disparos o las explosiones. Cruzando el multiverso avanza por la misma senda con resultados aún más rompedores. Sony, principal estudio de producción del filme, desarrolló 17 nuevas herramientas solo para las imágenes y los movimientos.

«Buscamos que cada uno de los personajes sea representativo de su mundo y ese fue un gran desafío para nosotros», revela Dos Santos acerca de los cientos de superhéroes que desfilan por la pantalla. «El mayor desafío para nosotros fue no repetir lo que hicimos en la primera película. La primera película fue un cambio de paradigma, transformó las expectativas de muchas personas y ahora nos veíamos obligados a volver a cambiar las reglas. Esta película ni siquiera se parece a la primera y eso hizo que el trabajo fuera muy emocionante para nosotros», reconoce Kemp.

El resultado final es una experiencia cinematográfica sorprendente. «Queremos que el público salga del cine sintiendo que ha emprendido un viaje hacia una experiencia completamente nueva», reitera Kemp. Pese a su deslumbrante aspecto y su ingenioso humor, el tema central de la película sigue siendo algo tan viejo y manido como la familia.

Miles es una especie rara de superhéroe, cuyos padres, a diferencia de otros hombres araña, no le han sido cruelmente arrebatados. «Él tiene algo por lo que luchar. La gente quiere adherirse a las reglas de ciertos mundos o iconos de la cultura pop, y Miles rompe muchas de esas reglas. La familia ha sido nuestra estrella polar a lo largo de este viaje. A pesar de lo grandilocuente que es esta película, nunca perdimos de vista la perspectiva de Miles y rastreamos la emotividad. Ese es el corazón de su historia y esperamos que la gente lo reconozca entre la locura de todo lo demás», explica Dos Santos.