El descuento mata al Ribadumia

Antonio Garrido Viñas
antonio garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

DEPORTES

07 may 2012 . Actualizado a las 13:27 h.

Ribadumia: Moncho, Iago, Lozano, Iván, Santos (Roi, min 57), Manu, Iago Paz, Fernando, Manu Nieto (Dani, min 78), Chiño (Roberto, min 62) y Édgar (Berto, min 59)

Arousa: Jorge, Ríos, Juanjo, Vixo, Rivas, Oliveira, Josiño, Comesaña, Adrián López, Camiño y Eloy (Julito, min 84)

Goles: 1-0, min 28: Manu Nieto. 2-0, min 56: Manu Nieto. 2-1, min 67: Adrián López. 2-2, min 95: Adrián López.

Árbitro: Extremadura Hernández. Expulsó a Pablo Vázquez. Amarillas a Mocho, Iago, Lozano, Iago Paz, Édgar y Dani; Vixo, Rivas y Comesaña.

Incidencias: Buena entrada.

No fue una derrota, pero la sensación para los locales es la misma. Al Ribadumia se le escapó el triunfo en el derbi, y buena parte de sus opciones de conseguir el ascenso, en el minuto 95. Con el Arousa volcado en busca del empate, Oliveira hizo de Alexanco y peinó un balón que cayó a los pies de Adrián López -los locales reclaman que el delantero estaba en fuera de juego- y el arlequinado no desaprovechó la oportunidad para empatar.

La igualada se olía en esos últimos minutos angustiosos para los locales. No por ocasiones, pero sí por sensaciones. Cada balón colgado era un drama después del fallo de Moncho que propició el primer gol del Arousa, y los locales estaban prácticamente colgados del larguero y pidiendo la hora al colegiado, al que acusan de prolongar la segunda parte de más.

Y lo cierto es que el Ribadumia tenía el partido bajo control. Manu Nieto había adelantado a los locales en el primer tiempo y pudo marcar el segundo, que evitó Jorge Pérez con un paradón. El Arousa también tuvo aproximaciones peligrosas en una primera mitad entretenida. Al poco de comenzar la segunda parte llegó el segundo para los de A Senra que parecía matar el partido. Pablo Vázquez hizo los tres cambios prácticamente consecutivos y metió a jugadores para buscar las contras, pero estas no llegaron.

En realidad, lo que sucedió fue que el Ribadumia dio un paso atrás y cedió mucho campo al Arousa. No estaban muy inspirados los de Lino, salvo cuando el balón pasaba por las botas de Eloy. Pero no le hizo falta inspiración para recortar distancias porque Moncho -que hasta esa acción había tenido una actuación más que correcta- se lo puso en bandeja.

Después llegaron los nervios. Josiño ya tuvo una buena ocasión para empatar tras un gran centro de Eloy y el Ribadumia amagaba pero no contragolpeaba. Se limitaba a despejar. Hasta que llegó el gol de Adrián López en el momento más cruel.