El rojinegro lleva cinco goles de falta esta temporada, mejorando las cifras de Cristiano y Messi
25 abr 2014 . Actualizado a las 16:42 h.Los números de Marc Vidal (París, 1980) pueden hacer sonrojar al mismísimo Cristiano Ronaldo. El centrocampista del Lalín lleva esta temporada una decena de goles, la mitad de ellos de falta directa y otros tres desde el punto de penalti. Unas cifras a balón parado galácticas. El delantero del Real Madrid, al que apodan «la tuneladora», lleva cuatro goles de falta, tres en liga y uno en la Copa del Rey, mientras que Messi logró anotar este domingo su segundo tanto en liga al que hay que unir otro en Champions. Ambos, junto a Bale, que presenta los mismos números que el atacante azulgrana, son los máximos transformadores de Primera a balón parado. Y ninguno alcanza a Marc.
La derecha letal del centrocampista rojinegro desde fuera del área la han sufrido en sus carnes esta temporada el Gondomar, el Pontellas, el Ribadumia y el O Grove en la liga de Preferente y el Marcón en Copa. Sus números no son una sorpresa. «Excepto o ano pasado, acostumaba a meter entre seis e oito goles de falta cada tempada», explica el jugador. Sus mejores registros, recuerda, fueron en el Santa Comba, que de los 14 tantos que transformó nueve llegaron de falta, mientras que en el Estradense había marcado de esta forma ocho de los trece.
Con Marc, que a los 6 años empezó en la cantera del Lalín y llegó a jugar en Segunda B con el Lugo y el Ourense, la peligrosidad rojinegra a balón parado creció. Los rivales tratan de evitar situaciones propicias para el disparo. «Ao levar tantos anos todos nos coñecemos, nós tamén imos sabendo máis dos porteiros, uns que lle gusta moverse, outros non...», explica.
¿Y cuál es el secreto para marcar de falta? Marc responde que ninguno. «O golpeo é algo innato, unha cualidade do xogador. Entrénase ou mellórase, pero nácese con él. E como un xogador que é rápido, pódese adestrar, pero o que é rápido vaino ser sempre e o que é lento seguirao sendo», asegura. Añade que también influye la confianza a la hora de golpear y las sensaciones del partido, comparándolo con las rachas de los delanteros. El entrenador del Lalín, Luis González Pichel, apunta algunas razones de la efectividad del centrocampista: «A clave está na potencia do golpeo e na dirección, ademáis desde calquera distancia». Compara sus movimientos con el de otro especialista. «Como Koeman, ten moi mecanizado o golpeo e despois coa rosca que lle pon e a forza coa que vai, o balón é imparable para o porteiro», destaca.
Marc no mira hacia Primera. Tilda de «anecdótico» superar los registros de sus estrellas. «Fíxome en xogadores doutras categorías como Bossa (As Pontes) ou Pablo Rey. É como se tiveramos nós máis acerto. Se cadra tamén é porque tiramos máis», dice. Este jugador, que tiene entre sus referentes al gran especialista en faltas Juninho Pernambucano o al que fuera jugador del Atlético de Madrid, Pantic, tratará en lo que resta de temporada de aumentar su cuenta. Su guante con la pierna derecha ya lo dejó patente.