Otro clásico a dos voces

Xurxo Fernández Fernández
xurxo fernández REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

El excepcional momento de forma de Cristiano y Messi marca el espectacular duelo del Bernabéu

24 oct 2014 . Actualizado a las 04:00 h.

Zapatillas que brillan. Era lo único que le faltaba al Clásico (que se sepa). Pues ya no: mañana las llevará Cristiano Ronaldo. Sus botas nuevas se iluminarán (al parecer solo un poquito) bajo la luz del Bernabéu. El partido empezará a las seis de la tarde, así que quizá los focos del templo blanco esperen al segundo tiempo para rendirse, como acostumbran, a los pies del 7.

El portugués asumirá riesgos y estrenará calzado en una gran cita; la primera de la temporada entre los protagonistas de esta Liga desigual. Campeonato diseñado para mayor gloria de un par de equipos que esgrimen los más fastuosos planteles del orbe; cada uno, con su respectivo aspirante habitual a mejor futbolista del planeta.

El duelo Cristiano - Messi en el que han mutado las citas entre el Real Madrid y el Barça alcanzará su episodio número 20 con ambos actores en un momento dulce. El argentino ha superado los síntomas de la inexplicable apatía del curso pasado, dominado claramente por el portugués en el terreno individual. La estrella culé encadena cinco partidos consecutivos marcando, la mitad de los que suma el indiscutible líder del grupo merengue.

Cristiano Ronaldo

Voracidad goleadora

Los quince tantos que acumula Cristiano en liga (con una media de más de dos por partido) suponen el mejor arranque goleador de la historia de la competición. Y eso que el delantero luso se saltó la jornada 2, en la que su equipo cayó en Anoeta antes de enlazar otra derrota frente al Atleti. Ese titubeante comienzo de campaña, en el que el entorno mediático blanco llegó a cuestionar la continuidad de Ancelotti, está más que enterrado, pero reduce el margen de error del Real Madrid de cara al encuentro de mañana.

El cambio de dinámica, cimentado en tres goleadas consecutivas en siete días de septiembre, vino ligado a una nueva explosión anotadora del fenómeno de Funchal, que firmó un hat trick en Riazor antes de calzarle cuatro al Elche. Las aplastantes victorias de principios de octubre contra el Athletic (otros tres de CR7) y el Levante, con sendos 5-0, han redondeado el asombroso registro del vigente campeón continental, que acumula 30 dianas cuando aún no se ha cubierto un cuarto del trazado del torneo doméstico. Botón de muestra de la desigualdad del campeonato.

La evolución merengue pasó también por una alteración en el dibujo del curso pasado. Con el 4-4-2, Cristiano se acerca a las zonas de remate y aumenta (si cabe) su incidencia en el juego. Un protagonismo que Ancelotti verbalizó hace nada: «Cuando él juega, empiezas el partido 1-0».

Leo Messi

Asistencias y desequilibrio

Algo similar ocurre con Leo Messi, aunque el argentino ha adoptado en su resurgir un espíritu gregario, si es que algo así es posible en el de Rosario. Suma menos de la mitad de goles que el portugués en el torneo y ni siquiera es el máximo anotador de su equipo (ha hecho siete, por los ocho de Neymar), pero nadie ha dado tantas asistencias (siete, cuatro de ellas a su socio brasileño) ni generado tantas ocasiones (28) como la Pulga.

No ha visto puerta más de dos veces en ningún duelo esta campaña, aunque su implicación en otros aspectos del juego ha aumentado (o recuperado un nivel que parecía perdido) bajo la batuta de Luis Enrique. «Va a seguir siendo determinante para nosotros. Sigue siendo el número uno en todos los aspectos del juego», destacaba recientemente el técnico, al que Messi desobedeció la semana pasada cuando quiso cambiarlo ante el Eibar. Un gesto, corregido el martes frente al Ajax, que deja un rastro de hasta que punto los dos grandes de España se someten a sus estrellas.

Un duelo condicionante

Siempre protagonistas

Una pareja antagónica en virtudes y maneras cuya rivalidad también condiciona desde hace varias temporadas cada torneo en el que coinciden. La Liga los aproximó hace más de un lustro, acaparando así la atención de la mayoría de los aficionados al fútbol de todo el planeta. Hay incluso uno en Gales que se ha dedicado a recopilar cada dato que genera el duelo por el subjetivo título de mejor jugador del mundo (www.mesivsronaldo.net). Por ahora, el registro otorga al del Barça una ligera ventaja goleadora (283, por 272) y una abrumadora superioridad en el pase definitivo (102 a 64), pero Cristiano está en racha y tiene unas botas que lucen para el Clásico.