O Gatañal apretó como nunca

La Voz

DEPORTES

30 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

O Gatañal es el sueño de cualquier equipo. Ataca y defiende al ritmo de los suyos como en pocas pistas del balonmano español, por eso ayer los hispanos se sintieron más respaldados que nunca. Una hora antes de que el balón se pusiese en juego, centenares de niños ya ponían a prueba los aplaudidores y ensayaban los gritos de ánimo con los que querían arengar a los de Manolo Cadenas. Y, de paso, probaban también los tonos graves que emplearían cada vez que el siete austríaco tenía la pelota.

Cuando España y Austria saltaron a la pista, el estruendo se apoderó de un Gatañal, que durante la hora y media siguiente se encargó de ser el octavo jugador, al igual que hace cada sábado con el Cangas. Lo mismo vitoreaban las paradas de Sterbik -ovacionado incluso cuando cogió la mopa- que coreaban los goles de Víctor Tomás. Hubo incluso quién aprovechó para practicar idiomas a la hora de reclamar exclusiones para. «¡Two minuts!» pedían en una grada repleta hasta la bandera. Y es que nadie quiso perderse el espectáculo. Incluso Feijoo y el presidente del Celta, Carlos Mouriño, se apuntaron a la fiesta hispana.