El Mundial, una fiesta entre cuatro

Miguel Sesé COLPISA

DEPORTES

STRINGER | EFE

Márquez parte como favorito en un campeonato que se inaugura hoy en Catar

28 mar 2015 . Actualizado a las 04:00 h.

Cuatro pilotos destacados, dos de ellos en busca del tricampeonato, y una tercera marca, Ducati, como la gran incógnita de la temporada. El Mundial de MotoGP arranca hoy en el Gran Premio de Catar (hoy calificación de todas las categorías a partir de las 16.00 horas, Movistar TV), y lo hace con la certeza de que Marc Márquez es el claro favorito al título, pero con un sinfín de cuestiones que empezarán a resolverse en la desértica noche del emirato. El piloto de Cervera se paseó en los primeros dos tercios del pasado campeonato, y en compañía de su HRC parecen un binomio prácticamente inalcanzable para su compañero y los dos principales perseguidores.

Diez victorias consecutivas dejaron claro que el dominio del catalán en la categoría no iba a ser flor de un día, y que probablemente bajo su carenado estaban el presente y el futuro de MotoGP. Por si fuera poco, afirmó sentirse «mejor que en el año 2014», y las sensaciones de pretemporada le respaldan como el claro candidato para obtener su tercer Mundial en tres años en la prueba reina del mundo de las dos ruedas.

El propio Márquez, en un alarde de madurez, es el que nos marca el camino a la hora de encontrar cuáles serán sus principales amenazas, en Catar y en el resto de la competición: «Mi compañero y los dos pilotos de Yamaha han rodado muy rápido, pero las Ducati son las que han dado un paso importante, sobre todo en este circuito. Va a ser difícil luchar contra ellas, pero es bueno para el campeonato e interesante ver otros pilotos en cabeza, sobre todo Dovizioso, porque tiene mucha experiencia».

Y es que las licencias que pueden permitirse las monturas italianas gracias a su denominación Open las convierten en temibles, al menos hasta que consigan resultados suficientes como para que la reglamentación se vuelva en su contra y las devuelvan a un escalón por debajo de los que aspiran a las victorias. Junto a Dovizioso, Andrea Iannone está llamado a rodar muy rápido. No en vano ha sido uno de los pocos pilotos capaces de plantarle cara y batir a Marc Márquez, cuando ambos se encontraban en Moto2.

Sin embargo, parece complicado que Ducati pueda superar el papel de gran animador y convertirse en una alternativa real a la hora de hablar del Mundial, coto cerrado al propio Márquez, a Pedrosa y a dos Yamaha furiosas por reivindicarse. La marca de los diapasones sigue por detrás de las alas de Nakamoto, pero da la sensación de que, desde finales del campeonato pasado, han recortado la desventaja lo suficiente como para que sus dos titánicos pilotos, Rossi y Lorenzo, puedan competir con garantías contra las Honda.

Tito Rabat quiere marcar tendencia en Moto2

En Moto2, Esteve Rabat quiere convertirse en el primer campeón que revalida el título. Tito demostró una solidez a prueba de todo tipo de adversidades, y el nivel al frente del 2014 no puede suponer sino un primer paso en una carrera brillante en la élite del motociclismo. Suya es la presión, y suya la responsabilidad de cargar sobre sus espaldas con la vitola de máximo candidato. Sin embargo, no hay que irse demasiado lejos para encontrar amenazas. En su garaje estará el flamante campeón de Moto3, Álex Márquez, que desde la sombra, igual que el pasado año, pronto puede asaltar las primeras posiciones. Ya ha demostrado que no le incomoda en absoluto el papel de secundario, y que no le cuesta nada cambiarlo hasta transformarse en campeón. No será el único en intentarlo.

En el Mark VDS preocupa la alianza de Zarco con Ajo Motorsport, ya que el francés es altamente peligroso, y con una montura ganadora se transformaría en el ogro de la categoría. Otro box en el que hay puestas muchas esperanzas es en el de Páginas Amarillas HP 40, ya que bajo el mando de Sito Pons emergen un Luis Salom que se perfila como candidato si consigue hallar templanza y paciencia, y un Álex Rins que por fin encontrará una moto de su tamaño para demostrar que su insultante juventud, 19 años, y su incuestionable talento, van acompañados de la regularidad de la que adoleció en el 2014, donde no brilló como esperaba.

Además, los habituales Luthi, Folger, Kallio y compañía quieren pasar de luchar por triunfos esporádicos a convertirse en alternativas reales. Mucho ojo también con Nakagami, que falló estrepitosamente el pasado curso pero que posee un talento inagotable, y especialmente alerta con Sam Lowes.

El británico, de 24 años, ha brillado en diversos campeonatos y aparece en el Mundial de la mano de Speed Up. Un favorito, Rabat, y una pléyade de candidatos sobre las 600 centímetros cúbicos en un año con difícil pronóstico.