Un jugador sólido y con mucha fe en sí mismo

Manuel Piñero BAJO PAR

DEPORTES

23 jul 2017 . Actualizado a las 22:53 h.

Vaya por delante, antes de entrar a valorar las cuestiones deportivas del torneo, que el Open Británico está perdiendo bastante de su carácter, digamos, agreste. Los campos escoceses son totalmente naturales, no suelen ofrecer ese verde intenso y artificial como se ha visto en esta ocasión, con un campo excesivamente mimado. No, esta no es la esencia del Abierto Británico. Si Augusta destaca por las flores, el verde cuidado... el Británico brilla por su lado asilvestrado que no debería perder. Dicho esto, el escenario adulterado no resta un mínimo ápice el contundente triunfo de Jordan Spieth. Este chico es un ganador. Sabe competir en las grandes oportunidades. Ha sido capaz de reponerse a los contratiempos. Si hay una palabra que lo define esa es solidez. Tiene mucha fe en sí mismo. Lo tiene dentro. Es un magnífico ganador que se ha encontrado el tiempo meteorológico como aliado, que ha generado un escenario muy americano. No ha habido viento muy fuerte, la bola rodaba mucho en las calles... Spieth ha tenido su semana y se ha producido el desenlace previsto.

En relación a los jugadores españoles, esperaba algo más de Sergio García y sobre todo de Jon Rham. Pero sin duda el mejor de los nuestros ha sido Cabrera, quien está jugando con mucha personalidad en las últimas vueltas. Si se me permite arrebatar el epíteto atribuido a Spieth, Rafa también se está mostrando muy sólido. No, Sergio no ha estado fino, pero sigue emocionando ver cómo el público se ha volcado en aplausos con él al concluir su recorrido.