Optimismo entre los pescadores tras la primera jornada del curso en los ríos gallegos

La Voz

DEPORTES

Las condiciones del tiempo y del agua favorecieron el arranque en Galicia, con los deportistas debatiendo sobre el relevo generacional y disfrutando del entorno

19 mar 2023 . Actualizado a las 23:36 h.

Galicia se echó al río. Y podrá hacerlo, con carácter general, hasta el 31 de julio. Los lunes serán inhábiles y los jueves solo se podrá pescar sin muerte (ambos, excepto festivos nacionales y autonómicos). Para los 36.000 poseedores de una licencia hay disponibles 14.000 kilómetros de ríos, más embalses y similares. Las masas de agua salmoneras o de reo se habilitarán el 1 de mayo. En las zonas con la talla mínima fijada en los 19 centímetros, se permitirá pescar seis ejemplares. Serán cuatro en aquellas con tallas que superen los 21 y tres si están por encima de los 23 en los embalses. Así fue el primer día de la temporada.

A MARIÑA Y LUGO

Animado arranque, con una trucha de cuatro kilos

Cientos de aficionados de A Mariña disfrutaron en los ríos de la provincia, la más prolífica con 54 cotos. El burelense Victorino Jul Rodríguez, Kustó, capturó a las nueve de la mañana en el Miño una trucha de cuatro kilos, por el método del lance ligero a rapala. «Xa teño collido algunha así, pero está preto do meu récord», apuntó. Completó el cupo permitido. «O río vén estupendo, con moita auga e peixes», destacó el mariñano, que se desplazó a Outeiro de Rei porque en el Masma y el Ouro solo se permite la pesca sin muerte y tuvo «pouca fortuna» en el sorteo de cotos: «Fun dos últimos en escoller». Con la caña tuvo más suerte y ahora ya piensa en degustar su gran captura: «Comereina coa familia, feita ao forno».

El Eo, menos prolífico

Menos prolífica fue la jornada en la zona alta del río Eo, según explicó el presidente del Centro de Iniciativas Turísticas de A Pontenova, Francisco Javier Rois Taracho: «Había moi bo ambiente no río, pero moi poucas capturas». «Algún si colleu o cupo, pero a maioría pouca cousa. Eu ao final conseguín sete ou oito pezas, pero de moi pouco tamaño», explicó.

El Parga

En el río Parga, que pasa por Guitiriz y desemboca en el Ladra en Begonte, la situación fue parecida. Fernando Prieto, presidente de Amigos do Río Parga, explicó que el día había sido favorable, sobre todo a primeras horas, antes de que empezase a calentar el sol. También apuntó que el nivel del agua, aunque un poco bajo para el mes de marzo, era mejor que otros años.

COSTA DA MORTE

Suerte dispar

La apertura de la temporada de pesca ha arrojado resultados muy distintos en función del coto. Suso Vilar, de la asociación Fario de A Laracha, ha tenido bastante suerte. En un par de horas logró sacar las cuatro truchas del cupo en el Coto de Verdes, en Coristanco. «O río estaba perfecto, estaba como tiña que estar», explicó. Fue uno de los 18 afortunados que pudieron estrenarse en este famoso enclave de Bergantiños y todos ellos lograron las capturas que les correspondían, aunque Suso Vilar hizo como en ocasiones anteriores y devolvió los pescados al cauce. Como cebo, utilizó mosca. Casi todas las capturas se obtuvieron a primera hora.

SANTIAGO

Jornada redonda, a pesar del recelo

José Antonio Ferreiro es pescador de raza. Empezó de niño, junto a su padre, y ahí sigue, a sus 77 años. Pasadas las 8.30 horas ya estaba en el río Tambre, en el municipio de Oroso, con todas las ganas del mundo para estrenar la temporada pero también con recelo: «A campaña pasada acabou con moi pouco peixe e pensabamos que ía seguir igual». Pero no, la jornada fue muy redonda. No totalmente, porque se le escapó una pieza de las que asombran por el tamaño: «Foíseme por nada, porque se enganchou nunhas raiceiras. Cando din chegado case a toco coa man, pero deu un golpe e marchou. Era das mellores que nunca vin».

Al filo del mediodía ya dio por finalizada la tarea, con las cuatro truchas que le permite capturar el cupo, y después de liberar unas cuantas piezas. También recibió la visita de la Guardia Civil, y lo agradece: «Ten que haber algún tipo de control». Ferreiro comenta que, a pesar de que el estreno fue bueno, la tendencia histórica apunta en sentido contrario: «Levo toda a vida na pesca. Troitas sempre houbo, pero van a menos».

FERROLTERRA

Relevo generacional y experiencia medioambiental

Ferrolterra y el embalse de As Forcadas (Valdoviño) congregaron a un nutrido grupo de apasionados, en una mañana que se inició con neblina sobre el pantano., lo que, según apuntaron varios de los aficionados que acudieron a probar suerte, dificultó el atrape de ejemplares. Entre los afortunados destacan Ismael y Jony Romero, bautizados por sus compañeros como Los hermanos del pantano, que lograron dos capturas de trucha antes de las diez de la mañana. «Fue armar y lanzar y ya me picó una, aunque esa se me escapó», confesaba Ismael, que lleva practicando la pesca en el río desde que era muy pequeño.

A escasos metros de esta familia, Eloy Saavedra, de la Sociedad de Caza y Pesca de Xuvia subraya que varios millares de pescadores mantienen sus licencias en la comarca, aunque se nota la falta de relevo generacional existente en materia de pesca fluvial.

No obstante, en la otra orilla del pantano, Iago, de tan solo siete años, ejemplifica que el amor por la pesca no tiene edad. Junto a sus padres se desplazó desde Narahío para pasar un día en la naturaleza en familia. Su padre reflexiona sobre la transformación del deporte en los últimos años y pone el foco en el estado de conservación de los ríos. «Non sei onde vai poder pescar o meu fillo», asevera sobre el futuro de la pesca fluvial en la comarca.

«A troita é moi caprichosa», manifestaba, por su parte, un vecino de Moeche , mientras calibraba al borde del pantano si merecía enfundarse la ropa de faena. En su caso, explica, lleva desde muy joven acudiendo con regularidad a pescar porque, detalla, es una actividad «na que se pican os peixes, a ti pícache o gusaniño».

Divergen de esta opinión otro grupo de habituales que, a pesar no haber conseguido atrapar ningún ejemplar, entienden que «hai xornadas de pesca sen pesca que son bonitas». Y es que, según valora un integrante de la pandilla, el olor a verde, la tranquilidad y una cerveza fría hacen que estos planes sean, concluye, «como un partido sin goles, pero que disfrutas por la puesta en escena».

OURENSE

Condiciones idóneas

El primer día en Ourense fue perfecto para los aficionados, con condiciones idóneas, tanto a nivel climatológico, como a tenor de lo sucedido en los últimos meses. El caudal derivado de las lluvias de finales del 2022 y de los inicios del 2023 favoreció un entorno idóneo para la subida de la trucha, principal objetivo de los pescadores de la provincia, como se detectó en toda la cuenca del Miño y sus afluentes. En el resto de la geografía ourensana, la valoración fue similar, con un domingo muy atractivo para los asistentes a los 17 cotos que enmarcan sus límites. Las temperaturas fueron óptimas desde primeras horas de la mañana, arrancando en los 8 o 9 grados y el día de pesca fue perfecto también por la tarde.

Como apuntaba Paco Muñoz, un conocido aficionado y experimentado pescador, este primer día del curso fue satisfactorio y entretenido para la mayoría de las personas que se acercaron a los ríos ourensanos: «Encontré muchísima gente, más que en años anteriores. Muchos jóvenes e incluso pescadores que se acercaron en bicicletas». El veterano madrugó para acercarse al barrio de Untes, muy cerca de la capital ourensana y explicaba que el balance general de la jornada fue muy bueno: «En apenas medio kilómetro me encontré como unos veinte pescadores y la verdad es que casi todos venían contentos. Conseguí las cuatro capturas que marcan el tope, y la mayor rondaba el kilo. Otros compañeros también llegaban contentos, porque cumplían objetivos. Parece que será un año bueno en cuanto a las capturas, porque el río estaba bastante bien y se podrá disfrutar de buenas jornadas en las próximas semanas. En mi caso intentaré dejar un día en la semana para practicar la pesca de mar e intentar traernos alguna lubina».

BARBANZA

«Vir pescar foi o meu regalo de cumpleanos»

Cientos de niños disfrutaron del inicio de su primera temporada de pesca. Fue el caso de Martiño Alvite París, de Mazaricos, que celebró su undécimo cumpleaños en el río Maroñas, acompañado de su padrino Mario —los menores de 14 años no necesitan licencia este año siempre que vayan acompañados de un adulto que sí la tenga—, un gran conocedor de los ríos de la comarca. «Tiña moitas ganas de que empezase a temporada. De feito, vir pescar foi o regalo que pedín para o cumpreanos. A ver se a cousa se da ben e pillamos algo», apuntaba el joven que, pese a su inexperiencia, no vaciló a la hora de meterse hasta la cintura en las frías aguas de este pequeño pero caudaloso afluente del Xallas. Animado también por el deseo de probar el flamante vadeador con el que también le felicitaron el aniversario.

Arrancó el día visitando el tramo del Tambre a su paso por Portomouro, en Val do Dubra, y lo terminó en el embalse de A Fervenza, en Mazaricos. «A nosa intención era a de arrancar a campaña no Tambre, pero baixaba tan enlamado que parecía chocolate. Viñemos para o Xallas e A Fervenza, aínda que nalgún tramo hai máis pescadores que troitas», apunta Ramón Romero, aficionado que acudió acompañado de buena parte de los integrantes del Club de Pesca Gallaecia, de Santiago. «O primero día non é o mellor para vir porque hai moitísima xente. En calquera caso, a pesca foi moito a menos por mor da escasa limpeza de moitos ríos ou pola acción dos cormoráns, que acaban con todo. Fai dez anos, a esta hora —son apenas las once de la mañana— xa teníamos o cupo cuberto e hoxe collemos unha mediana».

DEZA-TABEIRÓS

Resultados desiguales

El inicio de la temporada de pesca resultó desigual en Deza-Tabeirós, aunque hubo más ríos donde apenas se produjeron capturas o menos que otros años, mientras sí se comenzó con cierto optimismo en otros cotos. Desde la Sociedade de Caza e Pesca de Lalín, que gestiona sendos cotos en los ríos Asneiro y Arnego, se apuntaba que había poca pesca y con el caudal del agua claro pero bastante bajo. Se espera por tampoco una campaña normal o tirando a floja en cuanto a capturas.

Desde la Sociedade de Caza e Pesca de Silleda, que gestiona los cotos de los ríos Toxa y Deza, hubo situaciones diferentes. En el primer cauce los aficionados consultados apuntaban a que había buen caudal, con capturas y picadas aceptables, para quienes empleaban cebo vivo. Mientras, en el Deza un grupo de tres pescadores se tiraron la mañana sin que casi ningún pez picase el anzuelo y con una única trucha capturada, en un río que contaba con bastante agua.

Información elaborada por Iván Rolle, Xosé María Palacios, Luis M. Rodríguez, M. G. Reigosa, Elba de la Barrera, X. R. Alvite, Cristina Viu, Javier Benito y P. G. Cundíns.

Un día de boas impresións

Luis Sandamil

Este domingo foi unha boa xornada de comezo de pesca. O caudal de ríos coma o Miño e afluentes era bo. Xente que pescou no Eo comentou o mesmo. Nese sentido, mellor case imposible. Por que era bo o caudal? Hai semanas, houbo chuvias fortes —lembremos o ocorrido en Begonte— e riadas como non se lembraban en anos. Nunha comarca coma a Terra Chá, por cuestións de orografía, fan falta esas riadas para que se limpen os fondos.

Por outra banda, o río levaba unha cor un pouco turbia, o cal, aínda que sorprenda a algúns, é bo para a pesca, xa que así as troitas se moven máis. Tamén a temperatura foi boa: este domingo, arredor das dez da mañá, había uns dez graos, e así, despois duns días algo frescos, móvense máis.

Falar da temporada é arriscado por agora. Haberá que facelo ao final, pero o tempo influirá moito. Da mesma maneira que as troitas se activan cando hai moita auga, con pouco caudal e temperaturas algo altas ocorre o contrario. Tampouco se pode esquecer a función dos pescadores. Nunha sociedade coma a nosa somos máis de 200 socios, pero cando se organiza unha limpeza no Miño ou nalgún afluente —o ano pasado fomos tamén ao Pequeno—, sempre aparecemos os mesmos. Hai xente que di: «Beneficíanse todos e só traballamos uns poucos». Fai falta un cambio de mentalidade, aínda que non é algo doado.

O que si está claro, creo que tanto no meu caso coma noutros moitos, é que o comezo da temporada é unha xornada de festa. Trátase de xuntarse con outra xente, de quedar para comer, de matar ese ‘gusanillo’ que foi medrando nas últimas semanas. Iso non cambia: é unha data sinalada, esta é unha xornada de festa e así a vivimos. Onte mesmo, por exemplo, xa non fomos pescar pola tarde.

Quero facer tamén unha chamada de atención sobre a importancia social dos pescadores. Se non houbese pescadores, non habería sociedades de pesca; e sen sociedades de pesca, habería menos avisos de contaminación ou de vertidos nos ríos. Lembremos tamén que sen pescadores non habería ingresos por licenzas, e habería, pois, menos fondos para dedicar á limpeza, á repoboación e ao coidado dos ríos en xeral. Facer impresións na primeira xornada de pesca non é nin pode ser definitivo, pero de todos os xeitos teño a esperanza de que esta vai ser unha boa temporada de pesca. 

Luis Sandamil es presidente de la Sociedade Amigos do Miño, que gestiona dos cotos.