Un futbolista se quedó inconsciente y fue trasladado al hospital tras sufrir una supuesta agresión en un partido de veteranos en Boiro

La Voz RIBEIRA / LA VOZ

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Momento en el que el jugador es trasladado en camilla
Momento en el que el jugador es trasladado en camilla

El portero del equipo visitante sujetó por el cuello a un adversario y lo lanzó contra el suelo «con uso de fuerza excesiva», recoge el acta arbitral

21 ene 2024 . Actualizado a las 23:41 h.

Mucha tensión se vivió este sábado en el campo de fútbol de Valiño, en Boiro. Allí se estaba disputando el encuentro entre el Club Deportivo Oasis Boiro y el Carreira, dos equipos de veteranos que militan en el grupo 1 de la Primera División de la delegación de Santiago. Los visitantes llegaron al descanso con ventaja, pero los locales lograron remontar y darle la vuelta al partido. Cuando corría el minuto 88 se produjo la jugada que motivó la suspensión del choque. El portero del Carreira se disponía a sacar rápido cuando un futbolista rival se interpuso en la trayectoria para retrasar el envío, una acción muy habitual en los instantes finales de los partidos.

En ese momento se produjo la supuesta agresión. Testigos de lo sucedido narran que el guardameta, un hombre alto y fuerte, sin mediar palabra, y como recoge el acta arbitral, sujetó por el cuello al delantero local «lanzándolo contra el suelo con uso de fuerza excesiva, sin estar el balón en disputa entre ambos. Levantándolo del suelo sujetándolo por la camiseta y dejándolo caer al suelo, repitiendo esta acción en tres ocasiones».

Personas que estaban en el campo indican que el agredido quedó tendido sobre el césped inconsciente. Uno de sus compañeros, que es fisioterapeuta, se acercó rápidamente para comprobar sus constantes y colocarlo de lado. Mientras, otro llamó al 112 para requerir la presencia de una ambulancia. Al indicar este que se trataba una agresión y no de un lance fortuito del juego, se activó un protocolo por el que también se personó una patrulla de la Policía Local y otra de la Guardia Civil, tomando datos de los jugadores implicados y del árbitro.

El agredido fue trasladado al hospital de Barbanza y recobró la consciencia durante el trayecto. Pasó la noche en observación y al día siguiente fue dado de alta, aunque debe permanecer bajo vigilancia. Ahora, el afectado podría presentar denuncia o la Guardia Civil actuar de oficio si lo considera, aunque desde el instituto armado indicaron que todavía se están recabando datos. En el acta también se reflejó que el jugador trasladado «resultó lesionado en su cabeza, cuello y tórax».

Por lo sucedido, el colegiado suspendió el encuentro y señala que «el juego se tiene que reanudar con un balón a tierra a favor del equipo visitante en el centro del terreno de juego».

El club boirense presentará alegaciones al acta

En el club boirense han confirmado que presentarán alegaciones al acta ya que, una vez leída, les parece «demasiado liviano» lo que se recoge en la misma. Señalan que el portero rival, que fue expulsado, tuvo que ser rápidamente interceptado por sus jugadores para evitar el ensañamiento posterior.

Lo ocurrido generó una trifulca y, según la versión de los locales, ellos intentaban apaciguar los ánimos mientras los visitantes insinuaban que el jugador agredido estaba fingiendo. Apuntan que esperan que se haga justicia y recalcan que en el campo se encontraban la madre, la esposa y los hijos del futbolista que acabó siendo trasladado al hospital comarcal.

Lamentan la actitud de su rival y piden al comité de competición que imponga una sanción ejemplar. También, sobre la reanudación del choque, consideran que debería ser con un penalti a favor.

El Carreira denuncia una agresión a su entrenador

Por su parte, desde el Carreira indicaron que su portero intentó levantar al futbolista rival del suelo y que están «dacordo co que se reflexa na acta». Apuntan que sí que hubo un zarandeo de su guardameta al delantero que motivó que este acabase en el suelo, pero no una agresión, y aclaran que condenan cualquier acción de este tipo o violenta.

En el club ribeirense aseguran que el número 9 del Club Deportivo Oasis Boiro agredió a su entrenador una vez el encuentro ya se había suspendido y que, de hecho, fue su portero el que intervino para que la situación no llegase a más.

Explican que este percance se lo hicieron constar tanto a la Guardia Civil como al colegiado, aunque este no lo recogió en el acta.