El canterano reconoce que pasó momentos duros a lo largo de la temporada
25 abr 2014 . Actualizado a las 02:29 h.Juan Carlos Real, centrocampista del Deportivo, ha advertido de que al conjunto coruñés, líder de Segunda con nueve puntos de ventaja sobre los puestos de promoción, no se le «puede escapar» el ascenso.
«La situación que tenemos es envidiable, estamos ahí por méritos propios y ahora no se nos puede escapar. Es inevitable que la gente haga cálculos, nosotros mismos hace unas semanas hicimos una estimación de en cuánto podría estar el ascenso, pero vamos partido a partido y estamos dentro de esa puntuación que queríamos», comentó en rueda de prensa.
El centrocampista coruñés explicó que la plantilla es «cauta» porque «aún quedan partidos para lograr el objetivo» de la temporada.
«Sabemos la distancia que tenemos respecto al tercero, pero no hacemos cuentas ni cálculos. No debemos confiarnos porque en esta categoría cualquier partido se complica y nunca sabes cuándo vas a perder», señaló.
«No debemos confiarnos»
En este sentido, reconoció que el Deportivo no se fía de su próximo rival, la Ponferradina, que visitará el próximo sábado el estadio de Riazor, pese a que está cerca del descenso y solo ha ganado un partido fuera de casa en toda la temporada.
«No hay que fiarse, la Ponferradina se está jugando la temporada. Por la diferencia en la clasificación puede parecer que es un partido fácil, pero no hay que confundirse», declaró.
Juan Carlos reconoció que se ha sentido «cómodo» en los dos últimos partidos, en los que Fernando Vázquez apostó por jugar con un pivote creativo (Juan Domínguez) y cuatro centrocampistas por detrás del delantero.
«A pesar de ser jugadores ofensivos, realizamos una buena labor defensiva, funcionamos bastante bien como bloque, somos un equipo solidario y eso es el secreto: todos corremos, ayudamos y estamos juntos», dijo.
El canterano aseguró que esta temporada aprendió «mucho» tanto cuando estuvo en el campo como fuera de él y con diferentes sistemas de juego porque todo «eso enriquece».
Eso sí, aunque ahora disfruta de un momento dulce, meses atrás no estaba tan cómodo y reconoció que pasó «momentos difíciles» en los que, además, escuchó silbidos.
«Cuando estás fuera del equipo, no te sientes bien y el público es el que ve el fútbol, el que paga la entrada y tiene la opción de decir lo que quiera. Cuando no estás bien, lo que necesitas es que te animen y no que aprovechen para pisarte, pero hay que respetar todas las opiniones», dijo.