El baño inteligente del que casi todos huyen nada más franquear la puerta

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

A ESTRADA

miguel souto

La falta de civismo hace impracticable el aseo público de la alameda estradense

06 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El baño público autolimpiable instalado en la alameda de A Estrada no acaba de ser útil para los fines para los que fue concebido. La culpa no es del baño en sí —que es amplio, cómodo y está equipado con todo lo que se espera de un aseo—, sino de los usuarios incívicos que lo convierten en un espacio nauseabundo del que cuesta hacer uso por mucha necesidad que uno tenga.

La instalación de un baño público en los jardines de A Estrada fue una de las grandes demandas de los asiduos de la alameda. Desde el cierre y la retirada del quiosco que en su día facilitaba este servicio bajo llave, muchas personas —sobre todo padres de menores que acudían al parque infantil— trasladaron al Concello la petición de un baño público.

El gobierno local acabó atendiendo la petición a lo grande y, en abril del 2021, instaló un baño público autolimpiable que le costó 70.000 euros a las arcas municipales. El hecho de ser autolimpiable, de entrada, parecía una ventaja innegable.

Sin embargo, apenas tres años de uso han demostrado que, cuando no hay civismo, de poco sirve la autolimpieza.

El baño cuenta con un sistema que, tras cada uso, realiza una autolimpieza. La taza se limpia, desinfecta y seca para que quede flamante para el siguiente usuario. Sin embargo, de nada vale esta higiene cuando la orina y las heces están por fuera. No es leyenda urbana. Ha llegado a suceder en alguna ocasión.

A mayores, el habitáculo está a menudo sembrado de papeles, latas de bebidas y todo tipo de residuos desperdigados por el suelo a pesar de que el baño cuenta también con papelera.

Este martes, por ejemplo, el baño no tenía papel higiénico, lucía una colilla en el lavabo y tenía papeles y una lata de cerveza en el suelo. En las paredes metálicas lucían pintadas de todo tipo: desde declaraciones de amor anónimas un tanto escatológicas, hasta insultos y esvásticas. El cambiador para bebés que hay en el recinto estaba roto y sucio, con un aspecto poco higiénico que evidencia que el uso para el que fue instalado no es el único que ha tenido.

Limpieza imposible

La autolimpieza del baño inteligente se complementa periódicamente con limpiezas manuales a cargo del personal municipal. Según explicó ayer el alcalde estradense, José López, la limpieza manual se realiza de forma diaria. «Se intenta controlar la situación, pero si no hay un poco de colaboración es casi imposible. Si seguimos con acciones vandálicas casi todos los fines de semana y con esta falta de civismo es realmente complicado, por no decir imposible, mantener el baño en un estado decente», indica el alcalde.

A día de hoy, la realidad es que el aspecto del baño es tan desolador que pocos usuarios tienen el valor de franquear la puerta. Al final, aún con baño, son mayoría los que han vuelto al viejo sistema: recurrir a los bares del entorno o intentar orinar tras un árbol discretamente.