En la mayoría se suspendieron las actividades exteriores y el recreo en el patio
23 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La nieve se dejó ver poco en la zona en la jornada de ayer, pero lo suficiente como para que la alerta por el mal tiempo, el frío y la lluvia intensa dejase en casa a numerosos escolares de la zona. Pesó, sobre todo, la falta de transporte escolar para la vuelta al cole y hubo padres que optaron por dejar a los niños en casa. Unas ausencias a las que se sumaban también la de los enfermos de gripe.
A última hora de la mañana la nieve y el granizo arreciaron por momentos en algunas zonas por lo que a la vista del empeoramiento del tiempo los padres acudieron antes a recoger a los niños. Ocurrió, entre otros, en los colegios de Agolada y Dozón, donde en algún caso se adelantó un poco la hora del comedor. Con los padres esperando, los niños abandonaron el centro en cuando comieron.
Eran muy pocos. Al colegio de Dozón solo fueron ayer siete alumnos a primera hora, a los que se sumaron más tarde dos más y en el de Agolada, de un total de sesenta solo fueron diez a clase. Otro que se quedó casi vacío fue el de Cercio, en el municipio lalinense. Faltaron sesenta y en las aulas solo hubo doce escolares. Entre los que no se perdieron el cole estaban cuatro alumnos de la zona que van al centro caminando desde sus casas.
En el colegio de Rodeiro faltó el 40 % de los estudiantes, 70 alumnos, mientras que en el Xesús Golmar, las ausencias sumaban 88 escolares, 67 de ellos de transporte. Las faltas se notaron más en las zonas más altas, en el centro de Soutelo de Montes, en Forcarei fueron 24 niños, de un total de 38 y en el Forcarei 35, de un total de 99. En el estradense de Codeseda faltaron 32 y fueron a clase, 46, doce de Infantil y 34 de Primaria. En Vilatuxe faltaron 32, de 82 y en el de Prado, 34, de 110 y en el colegio de Cerdedo, doce, de cuarenta.
Lo que sí provocó el mal tiempo fue la suspensión en la inmensa mayoría de los centros de las actividades en el exterior, incluido el recreo en el patio, en algunos casos. En la mayoría por precaución y en otros, simplemente como medida de cualquier día de lluvia, trasladando el recreo a los patios cubiertos, en algún caso.
En el colegio de Silleda., en cambio, la jornada fue de total normalidad, igual que ocurría en otros centros escolares como el de Marza, en Vila de Cruces. En el de Vilatuxe, por ejemplo, había programa por la tarde actividad de extraescolar de rugbi que se suspendió. En el IES Aller Ulloa de Lalín faltaron 166 estudiantes por la mañana, y por la tarde, las ausencias fueron más numerosas, mientras que en el IES Laxeiro no fueron a clase unos 75 por la mañana. La falta de transporte de vuelta hizo que a última hora de la mañana, o a primera hora de la tarde según el horario de cada centro, acudieran muchos padres para llevarse a sus hijos a casa. En algún centro incluso bromeaban con la posibilidad de habilitar el gimnasio para acoger a los alumnos hasta hoy a las 12.00, que es cuando volverá a funcionar el transporte.