Cuíña recrudece la crítica a Crespo por anteponer sus intereses a Lalín

Olimpio Pelayo Arca Camba
o. p. arca LALÍN / LA VOZ

LALÍN

M. s.

El alcalde lalinense cambia su postura del 26 de julio, cuando hablaba de intento de concertar el presupuesto con el PP e indicaba que «son xente que lle importa Lalín»

10 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En la política municipal de Lalín hay que estar pendiente del calendario para no perderse. Porque los posicionamientos de gobierno y oposición cambian con rapidez. Ayer, el alcalde de Lalín recrudecía su tono crítico con el líder de la oposición, José Crespo, y con el PP lalinense. La razón principal de la disputa está en la regularización de contratos de 38 trabajadores municipales, a los que se sumarán otra decena del Patronato Cultural: el alcalde, Rafael Cuíña, tildó ayer de «intolerable» que Crespo siga días después de conocerse la propuesta de la Inspección de Trabajo «sen ofrecer ningún tipo de explicación á cidadanía sobre un proceso que terá altos custes para os lalinenses e que é froito das nefastas políticas laborais que se practicaban neste concello na etapa do anterior goberno». Ve inexplicable que el líder popular siga tapando su responsabilidad en el asunto atacando al gobierno local, «pero que non sexa quen de dar a cara ante as múltiples desfeitas que pouco a pouco se van coñecendo, froito da súa xestión e cun alto prezo para os lalinenses, que agora nós temos que solucionar».

Cuíña fue más allá, y dijo que con sus habituales declaraciones, «Crespo amosa día a día que o seu modo de facer oposición se basea en antepoñer os seus intereses persoais e os do partido aos da cidadanía, que para el queda nun segundo plano, como se está evidenciando tamén no tema da regularización de persoal do que é o único responsable».

Unas palabras de Cuíña diametralmente opuestas a las pronunciadas dos semanas atrás. Y es que el 26 de julio, tras la marcha del edil Juan José Cruz de un gobierno municipal al que dejó en minoría, el alcalde de Lalín avanzaba su intención de intentar llegar a acuerdos con el PP para sacar adelante los presupuestos municipales. Apuntaba, entre otras cuestiones, que «por moito que me separe deles, sei que son xente que lle importa Lalín».

¿Qué pasó en esos 15 días? El 26 de julio, a juicio de Cuíña Aparicio, Camilo Conde podía estar detrás de la marcha de Cruz; pero a 4 de agosto, planteaba una posible conjura PP-iglesia para la espantada del que fue su edil. Y la crítica se multiplicó de nuevo.

CxL carga contra Cruz y cree que debe ser políticamente repudiado

Y mientras el alcalde cargaba contra Crespo y el PP, su partido ?Compromiso por Lalín? remataba el ataque a filas populares pero añadiendo munición crítica contra el edil Juan José Cruz.

CxL dice entender la postura del PP de aceptar la actitud poco ética «do concelleiro tránsfuga Cruz debido á súa cultura habitual de presunta compra de vontades, como puidemos observar en numerosísimas ocasións por parte do binomio Louzán-Crespo», en mociones de censura en la provincia. La formación asume su culpa «por levar a un personaxe desa catadura moral nas súas listas, mais a atitude escura do PP nesta cuestión é cando menos sospeitosa». Salta luego a la carga contra Cruz, y cree CxL que «debe ser repudiado politicamente, que non persoalmente, e evidenciar que en política non todo vale» y tilda actitudes como las de Cruz como representación de la concepción política del PP, «non daqueles que chegamos á política para mudar modos caciquís e clientelares».

CxL cree el transfuguismo una lacra en la sociedad, y quien la practica debe ser apartado de cualquier posibilidad de representación vecinal «e máis no caso de non poder representarse a si mesmos». Como colofón, dicen que desde ahora se dirigirán al responsable comarcal del PP, Luis López, ante la jubilación de facto de Crespo por sus compañeros.

Valentía temeraria

Si el gobierno municipal de Lalín tiene una hoja de ruta, se mueve entre la valentía y la temeridad. Rafael Cuíña aseguró que la marcha del concejal que fue en su lista, Juan José Cruz, no iba a variar un ápice sus posicionamientos. Hasta el momento, solo se vio un atisbo de acercamiento al PP a finales de julio, pero tras las vacaciones ha vuelto guerrero y sube el tono crítico: con 10 ediles en el gobierno, y 11 en la oposición, la valentía del alcalde no está en cuestión. Otra cosa es saber dónde comienza a ser temeridad política.

Dos frentes simultáneos contra la oposición a una semana del primer pleno en minoría

El doble ataque a la oposición municipal por parte de Rafael Cuíña y de su partido llega en un momento a priori delicado: a una semana del primer pleno que afronta el cuatripartito en minoría, y para una cuestión de trascendencia, como es aprobar el destino de 500.000 euros para obras públicas. Si el objeto de las críticas de regidor y CxL votan en contra, se frenarán esos proyectos. Cabe indicar, además, que Cuíña cifró en 100.000 euros el coste que tendrá el cambio de los contratos a indefinidos, y lamenta no poder destinar esa cifra a pistas rurales o ayudas sociales.

Por otra parte, el BOP publicaba ayer el decreto de revocación de las facultades de Cruz como concejal delegado de Ocio, Xuventude, Ferias, Mercados y Relaciones Vecinales que asumió el propio Cuíña Aparicio el 26 de julio, pero evita dar respuesta a las peticiones del edil en su escrito del pasado 22 de julio.