«Eu quería facer un grupiño en Rodeiro e que viñera máis xente que cante ou que toque»

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

RODEIRO

Cedida

Maruja Rey busca savia nueva para resucitar la Coral que vio muy diezmado el número de sus miembros en los últimos años

26 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

A Maruja Rey la conoce todo el mundo en Rodeiro. Profesora jubilada, la Coral de Rodeiro fue y sigue siendo una de sus grandes pasiones. El tiempo no pasa en balde y los miembros del colectivo que, como cuenta Maruja, «xa tiñamos todos unha idade» fue diezmando en los últimos años el colectivo. Unos fallecieron y a otros los achaques les impiden continuar la actividad, pero los que la conocen saben que a Maruja no hay quien la pare y trabaja desde hace tiempo en resucitar la coral de sus amores. Ahora, explica «xa somos vellos e aí atrás eramos oito».

De hecho, pidieron hace tiempo al Concello una sala en el centro cultural para ensayar los viernes, a las 16.00 horas. Y en eso andaban, con la idea de cantar en la misa de las recientes fiestas de San Vicente. «Ensaiamos o Himno de San Vicente e algunhas cancións, e nos acordaban todas», explica. Llegó el día y «un estaba malo, outro con lumbago, con gripe...». En definitiva «que quedamos dous sós e tivemos que falar co cura e dicirlle que sentíndoo moito non podíamos cantar».

Así que buscan savia nueva con la que renovar la coral y no les importaría cambiar de formato, el caso, es, apunta Maruja, «poder formar un grupiño e que viñera máis xente a que lle guste cantar ou que toque algo». El caso es continuar la actividad de la agrupación, que ya está registrada de antiguo, y «retomar as cancións porque hai tantas tan bonitas que nos alegraban a vida». Eso y la posibilidad de ofrecer una actividad con la que disfrutar, pasarlo bien «e que tamén axuda a distraerse».

Pese a estar en horas bajas, María Rey, quiere hacer todo lo posible para seguir adelante. de momento, cuenta, «xa teño un punto importante e fichei a Manuel Fontepedriña que toca o acordeón e a zanfona e lle encanta a música para axudar a levantar a coral e faremos como un grupiño». En él piensa para dirigirlos a la hora de tocar algunas canciones, aunque no les vendría mal también un profesor, dice.

El presidente de la coral «está en Chantada coa filla, ten un problema nunha perna e sexa renunciou ao cargo». Otros integrantes tuvieron que dejarlo también por problemas de salud, pero este que otros vengan. No hace mucho realizaron un curso de técnica vocal que le concedió Fecoga «e como precisabamos 30 persoas veu toda a coral de Botos e os de Bermés e pasamos dos 30», comenta.

Junto con Manuel Fontepedriña, que es su pariente, va a Lugo los jueves opara aprender a tocar la zanfoña «e andan a mirar se me conseguen unha zanfona porque el déixame a asúa». Hace poco los que quedaban en esos momentos en la coral celebraron una comida en A Latiza.

Maruja Rey no cesa en su empeño y hace un llamamiento a los vecinos que quieran sumarse a cantar o a tocar en el grupo mientras recuerda la cantidad de lugares a los que viajaron para contar con la coral y todos los buenos momentos pasados con sus compañeros.