Una veintena de consejos de las antiguas cajas y más de cien ex altos cargos, imputados

m. s. d. REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

03 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Las cajas de ahorros ya son historia y su tradicional opacidad empieza a tener sentido ahora que la Justicia va desvelando episodios vergonzosos como las indemnizaciones millonarias para quienes estaban al mando cuando se produjo la debacle. O la autoconcesión de créditos de altísimo riesgo a sus directivos y operaciones empresariales ruinosas.

Escandalosos capítulos de la reestructuración del sector financiero que ya sienta en el banquillo a un centenar de imputados de un total de 20 consejos de administración.

Con la denuncia de la Fiscalía contra 54 exconsejeros de Caixa Catalunya por «retribuciones e indemnizaciones desproporcionadas y ajenas a la situación real de solvencia» existente en el 2010, la entidad catalana nacionalizada se sitúa en el primer puesto del ránking de directivos investigados por la Justicia. Supera a Bankia y a su matriz BFA, que era líder hasta la fecha con 33 imputados investigados por la Audiencia Nacional tras la querella presentada por UPyD por delitos de falsificación de cuentas, maquinación para alterar el precio de las cosas y apropiación indebida. La tercera plaza la ocupa la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), con 30 exconsejeros y directivos bajo sospecha.

Junto a los ahora nueve imputados de Novacaixagalicia, destacan también los 15 directivos señalados por la Justicia de Banca Cívica; la decena larga de ex altos cargos del Banco de Valencia o los cuatro exmiembros de la cúpula de Caixa Penedés.

Especial trascendencia tuvo la imputación del expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa por la compra del City National Bank of Florida, presuntamente con sobreprecio, que hizo pasar al banquero por la cárcel de forma fugaz, y terminó con el juez Elpidio Silva apartado temporalmente del ejercicio de la judicatura.