Linde ve a España en una senda estable, pero recuerda los riesgos de Europa

Rubén Santamarta Vicente
Rubén Santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

PACO RODRÍGUEZ

El gobernador del Banco de España pide reformas que impulsen el crecimiento, y cree que el crédito ha mejorado, aunque «está aún lejos de la normalidad»

24 oct 2014 . Actualizado a las 08:36 h.

El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, dejó ayer, en su primera conferencia en Galicia, una conclusión alentadora: «Las perspectivas [de la economía española] son buenas». Aunque hay sombras sobre el horizonte, en forma de una menor actividad del conjunto de la zona euro, expuso algunas señales que permiten advertir que la senda que se ha trazado en España es estable: «La EPA de hoy [por ayer] ha sido buena, el crecimiento del tercer trimestre, del 0,5 %, es bastante bueno, y en el 2015 alcanzaremos un crecimiento del 2 %». «Vamos mejor que el conjunto de la Unión Europea, de países importantes de la unión monetaria», recordó durante el foro Perspectivas de la economía española en el entorno del área del euro, un encuentro que reunió a importantes representantes de la vida económica y política de Galicia en el Museo de La Voz de Galicia, en un evento patrocinado por Caixabank.

Pese a esas perspectivas positivas, a Linde, un economista con dilatada experiencia en el exterior, no se le escapan los peligros que están latentes, y que provienen, como señaló, de la zona euro. «Hay riesgos que no se veían hace ocho meses en la zona euro», apuntó. Su discurso iba parejo al de Jordi Gual, director de planificación de Caixabank, que en la presentación del gobernador había reconocido ese tirón de la economía española, pero también los temores a una ralentización. «Las perspectivas, en todo caso -resumió Gual-, son alentadoras».

Linde mantiene que la receta para evitar sustos mayores pasa por abundar en las reformas estructurales, sobre todo en algunos potentes países europeos; no los citó, pero parecía que sus mensajes iban dirigidos a Francia e Italia. Como idea, sugirió que la reforma laboral implantada por el actual Gobierno, se traslade a otros lugares del continente. «Esa reforma ha sido muy importante y muy necesaria».

Lo que falta por hacer

Esa petición de Linde de nuevas reformas encaja también con el discurso que ha ido trasladando el presidente del BCE. Mario Draghi ha ido apremiando a los diferentes estados a mover ficha, porque eso -las tareas ejecutivas- escapa de sus competencias. Igual que le sucede a Linde. El gobernador español, recordando precisamente las limitaciones que tiene el BCE, aplaudió las medidas que ha ido tomando el guardián del euro en las últimas semanas. Sobre todo la compra de bonos; el acceso a la liquidez a cambio de financiación a empresas; o los bajísimos tipos de interés: «El BCE ha reaccionado bien, en un tono expansivo».

Poniendo la vista en los dos últimos años, Linde cree que la economía española se mantuvo en el 2013 por el importante tirón de las exportaciones. Y en este 2014, estas no están dando las alegrías que se esperaban. Sin embargo, la cara ha venido por donde quizá menos se confiaba: «Las menores exportaciones se han ido compensando por la demanda interna, que se ha comportado mejor de lo esperado».

La apertura del grifo

Queda aún recorrido para despejar todas las dudas, y una de las que le tocan más de cerca es saber qué sucederá con el crédito. «Las condiciones de financiación han mejorado, pero no lo suficiente, aún no estamos en tasas positivas». ¿Se traduce eso en que sigue sin haber dinero fresco para financiar proyectos?, se preguntó él mismo. «No, porque entonces no habrá crecimiento, ni habríamos tenido el volumen de exportaciones que hemos tenido. Habrá empresas que sí accedan a crédito, y otras que no, las solventes y menos endeudadas lo harán, tendrán más facilidad», avanzó.

Sin embargo, aunque la situación en esta importantísima clave para la economía «es menos mala, estamos lejos de la normalidad» en el flujo del crédito.