Despidos en el BBVA por gastar cien euros de forma irregular

EFE

ECONOMÍA

Emilio Naranjo | EFE

El consejero delegado de la entidad financiera, Ángel Cano, ha pedido un frente común para luchar contra la corrupción

29 oct 2014 . Actualizado a las 18:55 h.

El consejero delegado del BBVA, Ángel Cano, ha pedido este miércoles a todos los sectores de la sociedad española, empresarios, políticos, banqueros y medios de comunicación, que hagan un frente común para erradicar «de una vez por todas» la corrupción en España.

Cano se expresó de esta forma en rueda de prensa para explicar las cuentas de la entidad de los nueve primeros meses del 2014, en los que obtuvo un beneficio neto de 1.929 millones de euros, el 37,3 % menos que hasta septiembre del 2013, debido, fundamentalmente, a la ausencia de los ingresos extraordinarios anotados por la venta de algunos activos no estratégicos.

Si se descuenta el efecto de los mencionados ingresos, explicó, la ganancia neta habría crecido el 43,2 % y habría alcanzado los 2.277 millones de euros.

Cano mostró su esperanza en que los «desafortunados» casos de corrupción que estamos viendo estos días sean «el principio del fin» de esta lacra que tanto perjudica la imagen exterior de nuestro país.

Preguntado sobre las tarjetas opacas de la antigua Caja Madrid, el consejero delegado aseguró que en el BBVA son extremadamente rigurosos para evitar posibles usos indebidos de las tarjetas y explicó que han llegado a tener que despedir a algún empleado por gastar «cien euros» de forma irregular.

«Ni para comer con tu familia ni para poner gasolina»

«Las tarjetas están para pagar una comida con clientes, o para utilizarlas si haces un viaje de trabajo» y no «para comer con tu familia ni para ponerle gasolina a tu coche», zanjó Cano.

Cano también aprovechó su comparecencia ante los medios para presumir del resultado obtenido por el BBVA en los últimos test de estrés, que los situó entre los tres mejores de Europa, con una ratio de capital de más del 8 % incluso en el peor escenario de los contemplados, cuando el mínimo era del 5,5 %.

Sobre la situación en Cataluña, donde se han convertido en un banco con gran presencia tras la adjudicación el pasado mes de julio de Catalunya Caixa, Cano se ha mostrado confiado en que el Estado y esta región lleguen «a un entendimiento», ya que hay un amplio espacio para ello.

«Las cuestiones económicas« son las más importantes en este asunto, ha añadido Cano, que ha asegurado que, en el caso de la entidad, la operativa diaria del negocio es de »absoluta normalidad», hasta el punto de que incluso han recuperado muchos clientes que habían abandonado la entidad nacionalizada durante la crisis.

Preguntado por las posibles operaciones irregulares que se han producido en Catalunya Banc y que está estudiando la Fiscalía Anticorrupción, según adelantó ayer el ministro de Economía, Luis de Guindos, Cano aseguró que están completamente provisionadas en el balance.

Según dijo ayer el ministro, el organismo encargado de gestionar las entidades nacionalizadas, el FROB, ha detectado 23 operaciones irregulares, 16 de ellas en CatalunyaBanc, que han generado quebrantos de 2.600 millones.

Parte de los resultados de la entidad en España se deben a la evolución del área inmobiliaria, que sigue registrando pérdidas, de 598 millones de euros, que se redujeron el 29,1 % en tasa interanual.