R y Vodafone se llevan el macrocontrato de la Xunta para sus telecomunicaciones

m. beramendi / r. santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Telefónica se retira tras el recurso que había paralizado un proceso abierto en febrero con más de 39 millones de euros en juego

27 nov 2014 . Actualizado a las 07:03 h.

La multinacional de las telecomunicaciones Vodafone, de origen británico, y la gallega R Cable y Telecomunicaciones (que también tiene la mayoría de su capital en manos foráneas) se llevarán finalmente el macrocontrato de telecomunicaciones que la Xunta puso en marcha a inicios de año y que quedó en suspenso en verano tras una reclamación del tercer aspirante, Telefónica. El gigante español de las telecomunicaciones había presentado un recurso contra esa adjudicación inicial a Vodafone y R por no estar de acuerdo con los criterios de puntuación. Su alegación llegó ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, con sede en Madrid.

En el fondo de esta batalla estaba conseguir un contrato, repartido en tres lotes, para dar servicio durante tres años a la Administración pública gallega, por un máximo de 39,2 millones de euros, que era el importe por el que el Consello de la Xunta dio luz verde al concurso el pasado febrero. A la puja por todos esos lotes concurrieron las tres empresas citadas, y el 5 de agosto la Axencia de Modernización Tecnolóxica de Galicia (Amtega) resolvía el proceso. Los dos primeros lotes, por un máximo de 33,3 millones, eran para R, que se encargaría de la red corporativa multiservicio y de la telefonía fija. Y el tercer lote, por un máximo de 5,8 millones, para Vodafone.

El conflicto

Telefónica (que acudía con sus divisiones Telefónica España y Telefónica móviles) presentó de inmediato un recurso con el objetivo de acceder a la oferta de los competidores y conocer si la valoración había sido la adecuada. Esas alegaciones pararon todo el procedimiento, que ahora está a punto de resolverse. Hace unas semanas el Tribunal Administrativo Central daba la razón a Telefónica en la petición de acceso a los datos por los que se resolvió el concurso. Según fuentes oficiales, tras analizar esos datos sigue sin estar conforme con los criterios seguidos y entiende que ha habido criterios discrecionales por parte de los técnicos, en todo caso, legales. Pero finalmente la multinacional española ha decidido no seguir adelante con su batalla. La semana pasada, cuando se vencía el plazo para que diera una respuesta definitiva sobre el concurso, Telefónica optó por dar un paso atrás.

Fuentes de Amtega aseguraban ayer que el objetivo ahora es tramitar la adjudicación definitiva a las dos empresas ganadoras. Se encargarán estas -en cada una de las áreas- de dar servicios de telefonía, Internet y mantenimiento a unos 3.000 centros dependientes de la Xunta (incluidos casi 1.400 centros educativos). Según los cálculos de la Xunta, este contrato permitirá un ahorro de 13 millones de euros en tres años.