¿Por qué nos saquea el surtidor?

f. fernández REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

ALBERTO LÓPEZ

Galicia sirve los carburantes más caros de España; Consumidores y Xunta coinciden en apuntar con el dedo a la falta de competencia; pero también influye la elevada presión fiscal

05 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

De poco parece servir que aquí humee una de las cinco refinerías que Repsol posee en España. De ella, como de las demás, salen los carburantes de automoción ya preparados camino de las estaciones de servicio. Y las gallegas están bien cerca, pero ni así. Los combustibles que se venden en Galicia son los más caros del país, solo por detrás de Baleares. Lo dicen los informes de precios que cada mes publica la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que vincula esa circunstancia con que aquí se aplique el tramo máximo del impuesto especial de hidrocarburos, el mal llamado céntimo sanitario. Cada litro de combustible está gravado con 4,8 céntimos de euros más que en otras comunidades. Pero ¿será solo un problema de presión fiscal? O ¿habrá otros factores no tan objetivos? Xunta, Unión de Consumidores de Galicia y patronal de las petroleras recibieron una pregunta: ¿Por qué la gasolina en Galicia es la más cara de España? Y esto es lo que contestaron.

Xunta

«Falta de competencia».  «Os carburantes en Galicia son os máis caros da Península por un problema de falta de competencia no sector. E os datos o demostran con claridade», subrayan desde la Xunta. La prueba del algodón es comprobar qué pasa con el precios de los carburantes antes de impuestos. Y resulta que no son los más caros de España, pero por los pelos. En el caso del gasoil, el combustible más popular, Galicia es la tercera comunidad con el precio más alto. Y la cuarta, en la gasolina. «É evidente que isto é responsabilidade directa das operadoras do sector e non da Administración», destacan desde la Xunta. Y dan datos, como que el precio medio sin impuestos del gasoil en Galicia es un 2,4 % superior al de otras comunidades. En Cataluña, por ejemplo, ese combustible, antes de gravámenes, es un 5,2 % más barato que aquí; en Murcia, un 4,9 %; y en Valencia, un 4,4 %. Estas tres autonomías aplican también el tipo máximo del céntimo sanitario (4,8 céntimos por litro). La Xunta saca esta conclusión: «Se non existisen tributos ao combustible, Galicia seguiría pagando uns dos carburantes máis caros de España. Por iso o problema está nos prezos que poñen os operadores privados, non na tributación do combustible».

Unión de consumidores

«Non todo é culpa dos impostos». Ana Olveira Blanco, presidenta de la Unión de Consumidores de Galicia (Ucgal), cita los impuestos como primera razón de que los combustibles sean tan caros. «En Galicia padecemos o tramo autonómico do imposto de hidrocarburos máis elevado de todo o Estado. Isto é así por decisión exclusiva do Goberno da Xunta, que establece que as gasolineiras asentadas na nosa comunidade teñan que repercutir sobre as persoas que enchemos os nosos depósitos o imposto de hidrocarburos na súas franxa máis alta». Pero Ucgal admite que no solo la presión fiscal explica el fenómeno. Porque tan alto como en Galicia está en Cataluña el impuesto de hidrocarburos, sin embargo, «as súas estacións de servizo atópanse na parte baixa da táboa en canto a prezos de venta ao público». Por lo tanto, «non todo é culpa dos impostos», admite Ana Olveira. La presidenta de la Unión de Consumidores de Galicia habla entonces de «falta de competencia» en el sector, como la Xunta. «Achácase á dispersión o elevado custe do carburante na nosa comunidade, mais isto debería terse paliado coa existencia da refinería na Coruña. Parece, máis ben,  que a falta de competencia real existente algo ten que dicir ao respecto, xa que é certo que nalgunhas provincias de Galicia é practicamente imposible atopar carteis diferentes aos das grandes petroleiras». Olveira también recuerda que, informe tras informe, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia pone de relieve incrementos periódicos en el margen de distribución de las petroleras.

Patronal petrolera

La estación de servicio fija los precios. La asociación de operadores de productos petrolíferos (AOP) esquiva todas las críticas y si los combustibles son caros no es culpa de las petroleras. Lo es, en todo caso, de la elevada presión fiscal en España, donde casi la mitad de lo que abona un conductor cada vez que reposta un litro de gasolina o gasoil se la lleva el Ministerio de Hacienda y las comunidades autónomas que aplican el céntimo sanitario. Fundamentalmente es este último factor el que señala la patronal a la pregunta de por qué en Galicia es tan caro utilizar el surtidor. Pero la AOP también apunta que «en la mayoría de los casos, desde la reforma de la ley de hidrocarburos en el 2013, los propios empresarios de la estación de servicio los que fijan directamente el precio final». Esta explicación chirría cuando se comprueba que la mayoría de las estaciones de servicio que lucen una misma bandera expenden el combustible a un precio casi idéntico.