¿Es un buen momento para pensar en comprar casa?

Ana Balseiro
Ana Balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

El mercado inmobiliario ha recuperado su pulso, por lo que se observa un repunte de precios que se espera se intensifique durante este ejercicio

11 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Las estadísticas acaban de certificar que el mercado inmobiliario ha recuperado el pulso. Entonces, ¿es buen momento para comprar vivienda? Desde el departamento de análisis de Bankinter, que publicó el miércoles su informe inmobiliario para el 2016, la respuesta es afirmativa, porque «la combinación de una mayor demanda y una oferta muy limitada en las grandes ciudades permitirá un repunte de los precios medios en el 2016 y el 2017 cercano al 3 % anual, que podría alcanzar el 5 % en las localizaciones premium».

Es decir, que aunque la recuperación del mercado no es homogénea en todo el territorio nacional, sí que se observa un repunte de precios que se espera se intensifique durante este ejercicio. Por ello, dada la mejora de la coyuntura económica y su traslación al mercado laboral, para quien esté pensando en comprar, el actual podría ser el momento. Cabe recordar que, según el índice inmobiliario del portal Fotocasa, los precios subieron en cinco comunidades, Galicia entre ellas. Y, en el caso de municipios, en el de Barreiros, en Lugo, que fue exponente del estallido de la burbuja y de la devaluación del ladrillo, repuntaron por encima del 20 %.

Y al factor «cartera» se le suman otros «vientos de cola», como que las entidades financieras han reabierto el grifo del crédito y vuelven a financiar la inversión en ladrillo, aunque sin rebasar el 80 % del valor de tasación de la vivienda, escaldadas tras el estallido de la burbuja inmobiliaria, en la que se concedía incluso más del 100 %.

La ayuda del euríbor

Este momento es, además, especialmente propicio, porque el euríbor, el índice al que está referenciada la inmensa mayoría de las nuevas hipotecas que se suscriben, está no solo en mínimos históricos, sino que por primera vez ha entrado en terreno negativo. Aunque esto no significa que el banco vaya a pagar al cliente por su préstamo, sí se traduce en que esté abonará un interés menor al sumarle el diferencial que le aplique la entidad.

A todo lo anterior se une «el mayor atractivo de la vivienda como inversión», lo que, según Jesús Amador, analista de Bankinter, propiciará un «nuevo despertar de la vivienda en el 2016, siempre que el contexto político no derive en un deterioro de la confianza». La previsión de la entidad es que la demanda siga creciendo este año hasta las 420.000 viviendas -450.000 el próximo-, un 20 % más que en el 2015.

Para la responsable de estudios de Fotocasa, Beatriz Toribio, el tirón de la vivienda usada se explica «por su amplia oferta, gran parte en manos de los bancos, el mayor margen de negociación en el precio y los menores impuestos con los que se grava. Todo ello la hace más atractiva». Y se muestra optimista sobre el 2016, que será el de «la normalización». Si la economía no descarrila.