Una firma ourensana depurará el agua de una mina chilena

Limpiar el agua de una mina de cobre es sumamente complicado, pero una empresa ourensana ha logrado diseñar la tecnología para transformar ese líquido altamente contaminado en agua ultrapura. Su propuesta, de hecho, se impuso en un concurso en el que firmas de todo el mundo competían por lograr un contrato con una empresa minera canadiense que gestiona una explotación de cobre en el desierto de Atacama, en Chile. Allí la escasez de agua es enorme, así que era necesario buscar la fórmula para limpiar y reutilizar la de la mina.

Eso es lo que consigue el equipamiento ideado por la firma Vázquez Arias, que se encuentra en estos momentos en un contenedor marítimo rumbo a Chile, a donde el equipo que forma parte de la empresa se trasladará también para hacer el montaje in situ. «Lo que nosotros hemos enviado son equipos físico-químicos para tratar un agua contaminada con minerales pesados, procedente del lavado del mineral de cobre», explica José Seoane, gerente de la empresa ourensana, que acumula veinte años de experiencia en el sector. Afirma que «se trata de un líquido muy tóxico, corrosivo y contaminado al que hay que dar un tratamiento para convertirlo en el agua más pura que se pueda obtener, que se utiliza para la refrigeración de los cabezales láseres que se usan en la mina para el corte de la roca de la que se obtiene el metal».

Ese proceso lo consiguen con sistemas que han diseñado y montado en Ourense y que están hechos con componentes que proceden en su mayor parte de distribuidores gallegos. No es la primera vez que la empresa se embarca en iniciativas de este tipo y, de hecho, su experiencia en purificación de agua de minas y empresas pizarreras ha sido uno de los factores que los ha situado por delante en la primera fase del concurso. En breve saldrá la segunda, a la que también prevén presentarse, y están peleando en estos momentos por conseguir otros proyectos en Colombia y Perú.

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