Telefónica plantea un ERE para reducir su plantilla en España en hasta 3.000 personas

Edurne Martínez MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

Maximo Garcia de la Paz

Los sindicatos piden vincular el ajuste a la firma de un nuevo convenio que asegure el resto de empleos

27 nov 2023 . Actualizado a las 19:10 h.

Telefónica está preparando una reducción de varios miles de trabajadores de su plantilla en España aprovechando las negociaciones del nuevo convenio colectivo que acaba de iniciar con los sindicatos. En la reunión mantenida este lunes con los sindicatos mayoritarios (UGT, CC.OO. y Sumados-Fetico) la operadora planteó un ERE (expediente de regulación de empleo) para la salida de miles des trabajadores, según confirmaron a este periódico fuentes sindicales. Aunque la operadora aún no ha concretado la cifra, se estima que la cifra de despidos se moverá entre los 2.500 y los 3.000, según avanza Cinco Días

La de hoy ha sido la segunda reunión entre los representantes sindicales y la dirección de la empresa, aunque la primera solo fue una primera toma de contacto en el que la compañía reconoció que era necesaria una adaptación de plantilla, que cuenta actualmente con unos 16.000 empleados, pero sin concretar el método con el que se pretendían llevar a cabo estas salidas, si a través de un plan de salidas incentivadas o con un ERE. Finalmente, ha sido esta última opción.

La última vez que la compañía ejecutó una medida así fue en el 2021 y lo hizo a través de un PSI (plan de suspensión individual) en el que salieron 2.200 trabajadores, tras los más de 3.500 que abandonaron la firma en el 2019. Los sindicatos coinciden en que, en principio, el formato del ERE es más beneficioso para los trabajadores, aunque se mostraron cautos a la espera de que la dirección detalle las condiciones del expediente de regulación, tanto sobre el perfil de los afectados como por la cuantía de las indemnizaciones.

Desde el año 2000, la compañía ha recortado más de 42.000 puestos de trabajo, bien a través de ERE (el formato elegido hasta el 2013) o de PSI a partir del 2016.

El objetivo de los sindicatos es negociar un convenio colectivo «fuerte» para el período 2024-2026 en un período de creciente incertidumbre por la «regulación ineficaz y dañina» del mercado de las telecomunicaciones español, que permite la entrada de nuevos actores en el accionariado. Con ello se refieren a la compra del 9,9 % de los títulos (entre acciones y derivados) por parte del grupo saudí STC —que va a convertirse en el primer accionista de la teleco, por delante de BBVA y CaixaBank— y la posible entrada en el accionariado de la SEPI, la sociedad estatal.

Por ello, desde UGT ligan cualquier plan de salidas a la firma del nuevo convenio de empresas, con una duración mínima de tres años para «blindar a la plantilla» y sus condiciones laborales y económicas. «Todo ello sin menoscabo de que las personas que puedan estar afectadas por el ERE dispongan de garantías y condiciones similares a los planes de salidas anteriores», apuntan en una nota remitida a los medios.

La próxima reunión con la empresa será en unos días, pero los sindicatos adelantaron que, por el momento, las posturas entre ellos y la empresa están «muy alejadas».

Nuevo plan estratégico

En la celebración del Capital Markets Day del pasado 7 de noviembre, la compañía prometió una lluvia de dividendos a sus accionistas tras el desembarco de los saudíes. En el encuentro con inversores, la operadora presentó unas cuentas con un beneficio un 9 % superior, hasta los 502 millones, y exigió una «completa desregulación» para garantizar su autonomía estratégica.

El nuevo plan estratégico (denominado GPS) se apoya en cinco pilares «clave para acelerar su cumplimiento»: la sostenibilidad del crecimiento de los ingresos B2C (negocio con clientes minoristas); el mantenimiento del buen momento del negocio B2B (con otras empresas); la evolución de los ingresos derivados de los acuerdos con los partners de la compañía; la obtención de eficiencias que ayuden a reducir la estructura de costes; y la reducción de la inversión, pero manteniendo el perfil diferencial de Telefónica en el sector. Y es precisamente este nuevo plan estratégico el que tiene en vilo a la plantilla, que desconoce cómo va a repercutir en su trabajo diario.