El mayor fabricante de microchips del mundo paraliza la producción tras el terremoto de Taiwán

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Pichi Chuang | REUTERS

TSMC concentra la mitad del mercado y es clave para producir coches, ordenadores o móviles inteligentes

03 abr 2024 . Actualizado a las 13:41 h.

El mayor fabricante del mundo de microchips, TSMC, ha paralizado este miércoles toda la producción en sus fábricas tras el terremoto de magnitud 7,4 en la escala de Ritcher que ha sacudido esta mañana la isla de Taiwán. El sismo se ha saldado, hasta el momento, con siete muertos, el derrumbe de algunos edificios y numerosos daños en infraestructuras. 

La compañía, que suministra semiconductores a industrias como la automovilística o la tecnológica y de la que son clientes gigantes como Apple o Nvidia, anunció la evacuación de su personal y ya evalúa el impacto en las instalaciones y en las líneas de producción.

Este contratiempo ha vuelto a generar temor a un nueva nueva crisis de suministro global, como la que obligó a multinacionales como Stellantis a paralizar su producción en la factoría de Vigo al no disponer de microchips para sus vehículos. 

Aunque los ojos están puestos en TSMC, que concentra el 60% del mercado mundial de semiconductores (facturó 64.434 millones de euros en el 2023) , también genera preocupación el impacto en otros competidores más pequeños como United Microelectronics, que también detuvo la maquinaria en algunas plantas de Hsinchu y Tainan, según reporta Bloomberg.

Otras empresas del sector como Powerchip Semiconductor Manufacturing y GlobalWafers también han tomado medidas preventivas, deteniendo algunas máquinas y realizando inspecciones de seguridad en las instalaciones. 

A estas horas (13.30) TSMC cae un 1,3% en bolsa. Y es que todavía se desconocen las pérdidas económicas que ha podido ocasionar el terremoto y las que pueda desencadenar a causa de la paralización de las plantas. Las vibraciones, ya no las sacudidas fuertes, pueden destruir grandes volúmenes de microchips, que se fabrican y ensamblan con gran precisión. Especialmente los de chips de alta gama, que requieren un tratamiento especial y continuado sin interrupciones y en vacío. 

Además, el terremoto ha puesto en evidencia la necesidad de diversificar los centros de fabricación de semiconductores, que se concentran en esta isla. Estados Unidos ya urgió a TSMC a deslocalizar parte de la producción a otras ubicaciones por los riesgos que supone para la cadena de suministros global.