Rajoy advierte que la política no puede ser la alternativa a la ley

Enrique Clemente Navarro
enrique clemente MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

«Eso es ir contra el abecé de la democracia, la ley tenemos que cumplirla todos, nos guste o no» dice el presidente

26 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Mariano Rajoy advirtió ayer al presidente catalán, Artur Mas, de que la política no puede ser la alternativa a la aplicación de la ley, porque es «profundamente antidemocrático». «Eso es ir contra el abecé de la democracia, la ley hay que cumplirla y tenemos que cumplirla todos, nos guste o no, porque la ley en democracia es la expresión de la voluntad de la mayoría», afirmó en la sesión de control del Senado. Además, negó cualquier injerencia en la Fiscalía para que se querellara contra el presidente catalán. «La Fiscalía actuó con independencia. Yo no di ninguna instrucción a la Fiscalía y si no, ¿por qué unos han hecho una cosa y otros han hecho la cosa contraria», cuestionó.

Respondía al portavoz de CiU, Josep Lluís Cleries, quien acusó al Gobierno de promover la querella, que dijo no va contra unas personas concretas, sino «contra la manera de ser y hacer del pueblo de Cataluña» y aseguró que «nos sentimos prácticamente expulsados de un Estado que penaliza la libertad de expresión». En ese momento, Cleries y los demás senadores de CiU exhibieron desde sus escaños carteles con el mensaje: «Yo me autoinculpo 9-N». Rajoy criticó este gesto de autoinculpación: «No entiendo cómo puede decir que el Gobierno no respeta a la Fiscalía y luego da un espectáculo como el que acaba de dar».

Hoja de ruta

Además, dejó claro que es imposible pactar la celebración de un referendo. «¿Usted se cree que usted y yo podemos pactar un referendo de autodeterminación en contra de lo que dicen nuestras leyes? No podemos hacerlo. El límite que tenemos por suerte es la ley», aseguró.

A la pregunta de Cleries de si tiene alguna propuesta que hacer sobre Cataluña, esgrimió su hoja de ruta de cinco puntos: promover la estabilidad política y seguir con las reformas, colaborar con la Generalitat contra la crisis con mecanismos como el FLA o el pago a proveedores, reafirmar la soberanía nacional y la validez de la Constitución, hablar con los responsables de las instituciones para resolver los problemas reales de las personas y escuchar todas las propuestas salvo que pretendan liquidar la soberanía nacional o establecer el derecho de autodeterminación.