UPyD se juega hoy su supervivencia

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo BAreño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Cantó moderó sus críticas a Rosa Díez y se mostró «ilusionado» con la reunión de hoy.
Cantó moderó sus críticas a Rosa Díez y se mostró «ilusionado» con la reunión de hoy. JuanJo Martín | EFE

Rosa Díez tratará de ganar tiempo para aplazar la renovación, pero los críticos aseguran que es «el primer día del nuevo rumbo del partido»

28 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La crisis que atraviesa Unión Progreso y Democracia (UPyD), la formación creada por Rosa Díez hace siete años, ha puesto de manifiesto la dificultad de consolidar una nueva fuerza en un tablero político dominado desde el comienzo de la transición por dos grandes partidos, uno conservador -primero UCD y luego el PP- y uno socialdemócrata, espacio ocupado por el PSOE. Pese a lo que parecía un ascenso ordenado pero imparable del partido magenta en pasadas convocatorias electorales, UPyD ha entrado en una crisis repentina después de que Ciudadanos, con unos postulados casi idénticos a los suyos, le arrebatara su espacio. La formación magenta se juega hoy buena parte de su futuro en un consejo político en el que los críticos con la gestión de la líder, Rosa Díez, están dispuestos a forzar su relevo tras el fuerte varapalo electoral sufrido en los comicios andaluces.

Frente al deseo de este sector de forzar un voto de censura, Díez convocó un consejo extraordinario que se celebrará inmediatamente después del ya fijado de antemano, en el que lo que se someterá a votación será solo un documento de estrategia política de cara a los comicios municipales y autonómicos. El partido someterá de nuevo a votación la conveniencia de iniciar negociaciones con Ciudadanos en busca de una alianza.

El consejo de UPyD ya rechazó esa posibilidad en una votación anterior, pero la situación ha cambiado mucho desde entonces. A pesar de ello, los partidarios de Díez están convencidos de que la propuesta decaerá de nuevo por amplia mayoría. Pero, aunque eso suceda, la votación de hoy mostrará que los miembros del partido, y sobre todo de la dirección, que consideran imprescindible un acercamiento al partido de Albert Rivera, que consiguió nueve diputados en las elecciones andaluzas por ninguno de UPyD, es imprescindible para sostener los principios políticos bajo los que nació el partido.

Pese a la virulencia del enfrentamiento en los últimos días, que llevó al número dos de facto y diputado de UPyD en el Congreso Carlos Martínez Gorriarán a tachar de «irresponsables» a quienes pidieron la dimisión de Rosa Díez, entre los que se encontraban los también diputados Irene Lozano y Álvaro Anchuelo, en las últimas horas parece haberse abierto una mínima vía de solución a la crisis. El diputado de UPyD por Valencia y candidato a la presidencia de la Generalitat, Toni Cantó, uno de los más opuestos a la continuidad y la falta de asunción de responsabilidades por parte de Díez, que llegó a amagar con presentar la dimisión antes incluso de que se celebrara el consejo político, aseguró ayer que el de hoy será «será el primer día del nuevo rumbo de UPyD», y se mostró por ello «ilusionado».

Los críticos exigen cambios

El resto del sector crítico no se muestra sin embargo tan optimista como Cantó. Los representantes del grupo opuesto a Rosa Díez rechazan de plano la propuesta de la dirección del partido de aplazar cualquier toma de decisiones sobre la renovación hasta después de las elecciones autonómicas y municipales del 24 de mayo. Exigen que se tomen medidas de manera inmediata al entender que cuanto más tiempo transcurra sin abordar la renovación menos oportunidades habrá de sobrevivir políticamente. Estiman que el movimiento de Díez y los suyos solo es una táctica dilatoria que indica que los máximos responsables de la formación no están dispuestos a abordar las medidas que los ciudadanos le exigen con su castigo en las urnas.

Después de que la cúpula de UPyD impidiera que se sometiera el liderazgo de Díez a un voto de censura, los críticos buscan la manera de convertir el rechazo al texto de la resolución presentada por la dirección en una reprobación a su gestión. Algo que parece difícil, dada la ambigüedad deliberada con la que está redactado ese texto, que plantea celebrar una gran conferencia política en el mes de junio. Díez, por el contrario, está convencida de contar con el apoyo de la mayoría del consejo político, formado por 150 personas. Pero, según sus críticos, ese órgano no representa a las bases porque la situación del partido ha cambiado mucho desde que el consejo fue creado con el voto de los delgados en noviembre del 2013.