Vox busca arroparse con socios internacionales de cara a las europeas

Javier Arias MADRID / COLPISA

ESPAÑA

El líder de Vox, Santiago Abascal, en una imagen de archivo.
El líder de Vox, Santiago Abascal, en una imagen de archivo. Eduardo Parra | EUROPAPRESS

La formación intenta exhibir músculo tras su declive en representación del 23J

08 ene 2024 . Actualizado a las 19:28 h.

La incertidumbre que imperaba en el panorama político nacional el pasado mes de octubre —cuando faltaban todavía treinta días para que Pedro Sánchez consiguiese ser investido de nuevo como presidente del Gobierno— evitó que Vox celebrase el macroevento que viene organizando desde el año 2021 y en el que pretendía transmitir una imagen de fuerza después del fiasco de las pasadas generales del 23J.

Pero el inicio de año y la necesidad de los de Santiago Abascal de volver a adquirir protagonismo político ha colocado entre las prioridades de Bambú 12 (dirección de la sede nacional de Vox, en Madrid) el llevar a cabo el Viva 23, nombre con el que el partido bautizó en su día esta convención, antes de las próximas elecciones europeas del 9 de junio.

Reunir a la derecha radical

La dirección nacional de los voxistas lo organizará, con casi toda probabilidad, para el mes de mayo. Siempre antes de unos comicios comunitarios que, en el contexto actual, se antojan cruciales para la formación. Y su plan magistral, su as bajo la manga, pasa por volver a reunir a algunos de los principales líderes de la derecha radical a nivel internacional, al igual que ya habían hecho en las anteriores ocasiones.

En el último, celebrado en octubre del 2022, estuvieron presentes Javier Milei, recién elegido primer ministro argentino (en aquel momento era diputado), Mateus Morawiecki, ex primer ministro de Polonia, Álvaro Uribe, expresidente de Colombia, o José Antonio Kast, líder del Partido Republicano en Chile. Además, aparecieron telemáticamente Giorgia Meloni, primera ministra italiana, Donald Trump, expresidente de Estados Unidos, y Viktor Orbán, líder del Gobierno de Hungría.

El único motivo que podría echar por tierra otra vez dicha celebración sería una repetición de las generales, lo cual ahora mismo parece poco probable. Los de Abascal creen que este evento es la forma idónea de exhibir músculo antes de una cita electoral, la de las elecciones europeas, que supondrá la primera prueba de fuego tras el declive en representación del 23J —perdieron casi 20 diputados con respecto al 2019— y los cambios internos desencadenados posteriormente. Actualmente, la formación cuenta solo con los tres eurodiputados que cosechó hace ya cuatro años.