Audi cambia de estilo en el pequeño Q2

MOTOR ON

El Q2 llama la atención por su diseño juvenil, desenfadado e inconformista, con el que se diferencia un tanto de sus hermanos mayores, Q3, Q5 y Q7. Pero a pesar de ello, por comportamiento, carácter y sensaciones, sigue siendo un auténtico Audi. Ya está a la venta desde 27.450 euros en su versión 1.6 TDI de 116 caballos.

11 dic 2016 . Actualizado a las 05:55 h.

Todo apunta a que el Q2 se convertirá en el nuevo fenómeno comercial de la firma de los cuatro aros, que aspira con él a meterse entre las diez marcas más vendidas en España, a pesar del carácter premium de sus modelos.

El Q2 se convertirá en su modelo crossover más pequeño de la gama, con sus 4,19 metros de longitud, con lo que rivalizará con modelos como el Mini Countryman, el Mazda CX-3 o el Nissan Juke, entre otros.

Dentro de la marca, sin embargo, el Q2 será una alternativa clara a otros modelos como el Audi A1 Sportback (3,97 metros) o el mismo Q3 que, a pesar de ser más grande, parece menos atractivo e incluso equipado que su hermano pequeño.

El Audi Q2 es un vehículo que se desenvuelve bien por la ciudad con sus dimensiones reducidas, pero que no le hará ascos a los desplazamientos por carretera o a alguna escapada al campo. Se reconoce enseguida como Audi, sobre todo en su vista frontal con su parrilla trapezoidal albergando sus cuatro aros y sobre todo por su mirada con faros led opcionales. Es en su vista lateral donde marca ese nuevo estilo del que hablamos, con un pilar trasero muy ancho y en diferente color a la carrocería, que es el elemento que le define.

El maletero tiene capacidad para 405 litros, ampliables a 1.050 abatiendo los asientos posteriores. Opcionalmente, el portón puede abrirse de forma eléctrica.

Motores

En su lanzamiento sale al mercado español con dos versiones diésel, un 1.6 TDi de 116 caballos y un 2.0 TDi de 190, con tracción Quattro y cambio S Tronic. En gasolina, de momento, solo contará con el versátil 1.4 TFSi de 150 caballos con desconexión de cilindros y de consumos muy moderados, que podrá elegirse con cambio manual de seis velocidades o S tronic de siete. La primera de estas versiones tiene un precio de 29.340 euros.

Para más adelante se esperan otros motores como el 1.0 TFSi de 116 caballos, que será el acceso a la gama de gasolina, el más barato por tanto, además del 2.0 TFSi de 190 caballos. En diésel completará la gama el 2.0 TDi de 150 caballos.

Las versiones más potentes en diésel y gasolina llevarán la tracción Quattro, mientras los cambios automáticos S tronic de doble embrague con levas de cambio en el volante serán opcionales en las versiones más pequeñas.

Cuando decimos que el Q2 apunta a ser un éxito comercial es porque, a pesar de su pequeño tamaño y su imagen desenfadada, posee toda la tecnología que se le puede pedir a un coche de esas características. Su conducción se hace muy agradable y fácil desde el primer momento.

Cuenta con el Audi Virtual Cockpit, un tablero totalmente digital, incluidos los relojes habituales, y que además es personalizable. También vemos proyectados los datos de la navegación, velocidad o señales en el parabrisas, para facilitar su manejo. Además el sistema de infoentretenimiento se maneja con facilidad en su versión básica con pantalla de siete pulgadas y volante multifunción, o en una más avanzada con monitor de 8,3 pulgadas, módulo 4G para conexión de alta velocidad, eSIM de serie con tarifa plana de datos y roaming para Europa, así como punto de acceso Wi-Fi para conexión de los dispositivos móviles que viajen en el coche. El móvil se puede cargar por inducción y se pueden dar órdenes vocales para manejar el teléfono, la radio o la navegación.

A nivel de seguridad y asistencia al conductor, el Q2 no se queda corto, con sistema de frenada automática con detección de peatones, control de crucero adaptativo, sistemas de asistencia a la conducción en atascos, corrección de la dirección para mantener el coche en el carril y la ayuda al aparcamiento.

El Q2 se maneja de forma fácil e intuitiva. Su tamaño y peso lo convierten en un vehículo ágil en ciudad y en carretera de curvas. Es un coche que gustará a casi todo el mundo, incluso para animarles a bajar desde una categoría más grande.