Entre todas las nuevas aplicaciones móviles disponibles en la actualidad hay una que puede revolucionar la vida de las mujeres. Se llama y se presenta como una alternativa efectiva y probada científicamente frente a la píldora anticonceptiva, pero también de ayuda para las que se quieren quedar embarazadas.
23 oct 2016 . Actualizado a las 12:16 h.La idea original procede de la física noruega Elina Berglund, especializada en el estudio de partículas, y su marido, el médico Raoul Scherwitzl. Ambos toman como premisa el hecho de que una mujer sea fértil hasta 6 días por ciclo y llaman a medir cuidadosamente la temperatura del cuerpo para encontrar así el día de la ovulación y los más propensos a ser fértiles, pues la temperatura funciona como medida indirecta de las hormonas naturales del cuerpo e indica la ovulación. Las usuarias de Natural Cycles deben tomarse la temperatura cada mañana antes de levantarse de la cama. Además, hacen una llamada a la calma para las mujeres que no tengan un ciclo regular: «Identificamos con independencia de la regularidad de la ovulación de su ciclo».
Para entender los orígenes de la aplicación hay que rebobinar unos años en la vida de Berglund, cuando trabajaba como investigadora del Laboratorio Europeo de Física de Partículas Elementales (CERN), donde descubrió junto a un equipo de investigadores el bosón de Higgs, con el que se explica el origen de la masa de estas partículas.
Lejos de acomodarse en el puesto, decidió renunciar a su trabajo para cambiar de campo y centrarse en el de la reproducción femenina. Su idea, conseguir desarrollar un algoritmo inteligente que permitiese encontrar el ciclo natural de cada mujer y convertirse en una alternativa a la píldora anticonceptiva.
Partiendo de cero
«Empezamos la compañía para dar respuesta a nuestra propia necesidad. Estábamos buscando una forma segura, natural y fácil de controlar la natalidad y no había ningún método en el mercado», explica Berglund, pero ahora Natural Cycles sirve de ayuda tanto a las mujeres que desean la maternidad como a las que quieren prevenir un embarazo. «Al principio, estaba emocionada y aterrorizada a partes iguales. Creo que no hay casi nada más increíble y divertido que la creación de un negocio y un producto propio. Sobre todo, partiendo de cero, y luego llega el momento de presentarlo al mundo», comenta Berglund, para quien el gran reto como fundadora fue aceptar que tenía que delegar responsabilidad en otros y ceder parte del control.
Berglund explica cómo el éxito de la aplicación depende de un algoritmo al que han llamado Alba, como su hija. «Es único, porque se basa en la recogida de datos de cientos de miles de ciclos. Esto significa que los ciclos naturales pueden adaptarse al cuerpo de cada mujer de forma individual y, con un alto grado de precisión y exactitud, determinar cuándo está ovulando», añade.
El precio de la suscripción anual está fijado en 5,40 euros al mes, más los 29 euros que cuesta el termómetro. Por ello, Natural Cycles se presenta como una opción más barata, pues cuesta un 40% menos que un tratamiento basado en la píldora.
El índice de fracaso de la aplicación se sitúa en cinco de cada mil mujeres, mientras que el de la píldora está en tres de cada mil. Por ello, no es de extrañar que ya tenga más de 100.000 usuarias activas en 161 países. Sólo en Suecia, en apenas 18 meses captaron el 4% del mercado.
A sus 32 años, Berglund es ahora una de las mujeres de negocios más importantes de su país, pero además ha recibido múltiples premios como Mujer de la Tecnología en el 2015. No en vano, los ingresos de la compañía superaron los 1,82 millones de euros el año pasado.
Desde Natural Cycles presumen de hacer equipo con los principales expertos en el campo de la contracepción y la fertilidad para llevar a cabo la investigación. Entre ellas, la profesora de Obstetricia y Ginecología Kristina Gemzell, quien defiende que las mujeres tengan completa libertad sobre su propio cuerpo: «Ninguna mujer debería tener que morir a causa de un embarazo».