Apuntes históricos

Brais Capelán

EXTRAVOZ RED

«Assassin?s Creed» ha empleado, con mayor o menor rigor, a distintos personajes históricos en sus videojuegos, una tendencia que tendrá continuidad con el lanzamiento de «Origins», que estará ambientado en el Antiguo Egipto.

23 jul 2017 . Actualizado a las 04:00 h.

El 27 de octubre llegará a las tiendas de todo el mundo Assassin’s Creed: Origins, una nueva entrega de la franquicia de Ubisoft. En esta ocasión, sus creadores han escogido el Antiguo Egipto como escenario principal de esta aventura. Se trata de una vieja demanda de los fans, ansiosos por poder explorar nuevas fronteras históricas. Si algo ha hecho la serie Assassin’s Creed desde su origen en el 2007 es ahondar en distintos momentos históricos, aportando una trama ficticia que se complementaba con personajes reales y enormes y detalladas localizaciones.

Al inicio de cada juego, Ubisoft mostraba en la pantalla el siguiente mensaje: «Este juego está basado en hechos reales, pero la historia que se narra es ficción. El título ha sido elaborado por personas con diferentes creencias y culturas». Es cierto que se trata de argumentos creados por equipos de guionistas. También es cierto que dichas historias se nutren y alimentan de un elaborado contexto histórico que no escatima en personajes como Leonardo da Vinci o Napoleón Bonaparte para dar una mayor credibilidad al mensaje. Sí que hay documentos y libros en los que se cita una orden de asesinos a nivel mundial, pero nunca se ha llegado a profundizar sobre ello. La presencia de celebridades de distintas épocas puede ser una píldora de historia y conocimiento para los jugadores o servir para distorsionar los grandes acontecimientos de la humanidad y confundir al usuario.

No hay que olvidar que un gran porcentaje de personas que consumen a diario videojuegos son menores de 18 años y, por tanto, están en edad escolar. Alguien que está estudiando a Maquiavelo puede llegar a creer que formó parte de la orden de los asesinos, tal y como se apunta en la segunda entrega de la saga, donde el histórico filósofo forma parte activa del elenco de protagonistas. También uno puede llegar a pensar que algunos de los inventos de Leonardo tenían como destinatario a un joven florentino llamado Ezio Auditore, quizás el más carismático de los protagonistas de Assassin’s Creed. En la trama italiana, que abarca hasta tres títulos de la saga, los Borgia llegan a tener un papel protagonista.

Pero la historia de los asesinos no se queda solo en Europa, sino que da el salto a América, donde el mismísimo George Washington encarga varias misiones o Benjamin Franklin se convierte en un fiel aliado. Lejos de abandonar esas licencias históricas, la franquicia de Ubisoft Montreal las ha maximizado en sus dos últimas entregas, ya para la actual generación: Unity y Syndicate. En la primera, ambientada en la Revolución Francesa, Robespierre es parte fundamental en la trama, al igual que un joven Napoleón, con el que llevaremos a cabo diferentes encargos. En el Londres de finales del siglo XIX y comienzos del XX también conoceremos a Karl Marx, que se erigirá como líder del movimiento obrero y sindical para liberar a las clases populares británicas de la tiranía de los patrones. Además, el mismísimo Winston Churchill nos encargará, en una expansión posterior, mantener la unión del Imperio durante el transcurso de la Segunda Guerra Mundial.

Todavía no se conocen los detalles del papel que jugarán los distintos personajes históricos que participarán en Origins, como Cleopatra. Pero, para bien o para mal, Assassin’s Creed ha sabido jugar sus cartas para reunir a un elenco de actores jamás visto en otro videojuego.