El turismo extranjero y el buen tiempo reactivan los cámpings

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

ARES

CESAR TOIMIL

La práctica de deportes náuticos y la calma que ofrece la zona, dos de los atractivos

13 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

A pie de playa o más alejados de la costa. Con posibilidad de practicar todo tipo de deportes náuticos u ofreciendo retiro y paz lejos del bullicio. Y todo ello en estrecho contacto con la naturaleza y con precios económicos. Los cámping de la zona han comenzado la temporada con buenos niveles de ocupación, y captando clientes de fuera de España. «Se incrementó bastante el turismo extranjero. Llevamos quince días sobre todo con muchas personas de Londres y de Manchester. Hay mucho turismo inglés y también alemán», explica Graciela Díaz, copropietaria del cámping del Raso, en Ares, junto con Jessica Arribe. Además, sostiene que «si el año pasado en mayo y junio predominó el turismo extranjero, este año gana por goleada». Con un perfil de campistas mayores de 45 años, en un establecimiento como el del Raso buscan, añade, la tranquilidad que ofrece la zona.

Como el resto de profesionales del sector, tiene claro que para que la temporada sea buena, debe acompañar el tiempo, como está haciendo ahora. «Tenemos previsión de reservas», afirma Graciela Díaz.

También esperan tener una buena afluencia en el cámping de As Cabazas, en la ferrolana parroquia de Covas, que abrió la campaña el pasado día 1. María del Carmen Lago, su propietaria, constata la tendencia de incremento de la llegada de clientes extranjeros. «A este cámping, los que vienen de fuera lo hacen movidos por algún tipo de deporte acuático», sostiene su dueña. Surfistas y windsurfistas son, por tanto, algunos de los clientes de este recinto, a pie de las playas de Covas. No obstante, matiza que el perfil es variado, desde familias enteras hasta grupos de jóvenes o incluso deportistas solos.

En el cámping de Valdoviño, su gerente, Javier Fidalgo, también considera que los deportes náuticos es uno de los principales atractivos que traen a Ferrolterra a visitantes de otros países. «Dependemos bastante de la meteorología, pero somos optimistas, de hecho en cuanto a las reservas estamos mejor que el año pasado», afirma. En su establecimiento, el buen tiempo de estas últimas semanas ya ha animado la ocupación durante los fines de semana, principalmente del turismo nacional. «Los extranjeros están empezando a llegar, ya vemos el movimiento de las autocaravanas», explica Fidalgo, quien incide en que, «aunque estamos en una esquina, los que vienen recorriendo el norte, suelen llegar hasta aquí y después bajar hacia Portugal». 

Unos días

El factor tiempo es determinante en los cámpings para hacer que los usuarios prolonguen o acorten sus estancias en la zona. «El mío es cien por cien de paso. Si tenemos buen tiempo, se quedan más y si no, escapan. La media de estancia es de entre dos y tres días, de entre cinco y seis si es en los bungalós, que se mueven más cuando empiecen las vacaciones escolares», dice Fidalgo.