Al berberecho ortegano le ha salido un competidor, el berbigâo portugués

A. F. C. CEDEIRA / LA VOZ

CEDEIRA

José Pardo

Mariscadoras alertan de la bajada de precios que provoca la entrada de bivalvo luso

05 jul 2017 . Actualizado a las 17:28 h.

Al berberecho de las rías de Ortigueira y Cedeira les ha salido un competidor, no siempre leal, en opinión de las mariscadoras. «Vén de fóra, sobre todo de Portugal, e tamén algo de Francia, é máis barato e este ano estámolo notando máis. En anos anteriores levabamos máis vendido neste tempo, agora [los compradores] quéreno, pero moi barato, a catro euros o quilo, cando por estas datas tiña que andar polos cinco, porque estamos en xullo e xa hai turistas. Para nós o verán é como o Nadal», explica Pilar Trasancos. La presidenta de la agrupación de recolectoras de Espasante asegura que han renunciado a salir varios días «porque por tres euros non paga a pena, queda mellor na praia».

«Estábannolo levando a catro euros e puxémolo a cinco, porque o ano pasado ía por cinco ou seis; estes días non vendemos, pero agora chegamos a un consenso co comprador por 4,5», indica la responsable de la organización de mariscadoras de Cedeira. «Se é verdade que está entrando berberecho de Portugal a 1,5 ou 2 euros o quilo, iso é competencia desleal», sostiene Pilar López Bellón, que incide en la calidad del bivalvo que extraen de la reserva marina. «Temos a sorte de que é moi bo e aguanta moitísimo», subraya. «O de Portugal morre máis axiña e cando vaia a máis o calor xa non poderán traelo», apuntala Trasancos. Tanto en Cedeira como en Ortigueira, las profesionales del sector se han quedado en casa varias días por la negativa a comercializar un producto «de moita calidade» a precios que consideran aceptables en el mes de mayo, pero no en julio, en plena temporada estival, con un notable incremento de la demanda de marisco. «O peor de todo é cando o venden coma se fora de aquí, incluso co mesmo etiquetado», denuncia Cristina Trasancos, al frente de la agrupación de mariscadoras de O Barqueiro, que apenas recolectan berberecho.

«Las autoridades tenían que pelear para impedir que se venda producto de fuera como si viniera de las rías gallegas», incide Juan Carlos Pardo Galdo, patrón mayor de la cofradía de Cariño y percebeiro. Mariscadoras de otras zonas de Galicia llevan años alertando de la entrada de bivalvos lusos y la consecuente caída de los precios del marisco local. «Se xa non damos cuberto o cupo [de 20 kilos por jornada suelen recolectar 10], porque se non non temos para todo o verán, isto era o que nos faltaba», lamenta la presidenta del colectivo con sede en Espasante.

Temor a una marea roja

La amenaza de la toxina, producida por algas microscópicas en condiciones de temperaturas altas y mucha humedad, preocupa a las mariscadoras orteganas. El año pasado, en Cedeira se detectó en agosto y el banco se cerró hasta octubre. Alba Quintana, secretaria del pósito cedeirés y bióloga, enumera los tres tipos de toxina que pueden contaminar los bivalvos -diarreica, paralizante (muy peligrosa, pues afecta a los músculos, incluido el corazón) y amnésica (puede ocasionar pérdidas de memoria, pero no se ha detectado en las Rías Altas)- e insiste en que «no es ninguna broma» consumir ni, por supuesto, vender, marisco en mal estado.