Navantia inicia en la ría su primer buque militar en dos años y medio

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

FENE

El astillero de Fene acogió el arranque de la construcción del logístico australiano

20 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Dos años y medio después de iniciado el Buque de Acción Marítima (BAM), Navantia comenzó ayer otro buque militar en la ría ferrolana: el primer barco de aprovisionamiento en combate de los dos que en mayo del pasado año le encargó la Armada de Australia. La ceremonia de cortado de la primera plancha de acero se llevó a cabo en la antigua Astano -como ya había sucedido con el BAM- porque Navantia tiene previsto repartir la fabricación de los logísticos para las antípodas entre ambos astilleros, aunque el mayor peso de la construcción del navío y el montaje en la grada se efectuará en Ferrol. La chapa cortada -para el bloque 220-3- mide ocho metros de largo y 1,8 de ancho y supera los mil kilos.

El acto, que contó con la presencia del director de Navantia Fene-Ferrol, Julio Martín, y de los responsables del programa australiano en el astillero, tuvo un carácter interno.

Dentro de ocho meses se repetirá esta misma ceremonia, ya que se iniciará la construcción del segundo buque logístico. Ambos están basados en el modelo Cantabria, que fabricó Navantia para la Armada española. El contrato de construcción incluye, además de la fabricación de los dos barcos, la opción de fabricar un tercero y el mantenimiento de los dos por un período inicial de cinco años.

El primero de los barcos tendrá que ser entregado en el 2019 y un año después, el segundo.

La empresa que preside Esteban García Vilasánchez anuncia que esta obra supondrá ocupación para 1.800 trabajadores al año, aunque solo 330 pertenecerán a la plantilla directa. Otros 530 serán empleados de las firmas auxiliares y los 900 restantes de las plantillas de otros suministradores.

En total, serán tres millones de horas de trabajo que recaerán en la zona, a las que habrá que sumar otras 35.000 derivadas de la fabricación y suministro de los motores principales, diésel generadores y reductoras que se realizarán en el astillero de Cartagena. Otras tantas horas serán las que se consuman en la producción del Sistema Integrado de Control de Plataforma.

El cumplimiento de los plazos de entrega es el gran reto al que se enfrenta Navantia en esta obra, ya que tendrá que fabricar los dos buques en 42 meses, un período solo ligeramente superior al que tardó en fabricar el Cantabria para la Marina española.

Punta de trabajo

Aunque los trabajos se inician ahora en los talleres, habrá de esperar a finales de año o principios del siguiente para que comience a percibirse en la ocupación y el empleo en la ría.

En las próximas semanas tendrá que despejarse también la ceremonia de botadura del BAM, aplazada desde mayo.

El consejo aborda mañana el nuevo organigrama

Traerá cambios de responsabilidades a nivel directivo y en los métodos de trabajo

La Voz

Navantia celebrará el próximo miércoles su habitual consejo de administración mensual. Si no se modifican las previsiones, los consejeros abordarán el nuevo organigrama que ha elaborado el equipo que lidera Esteban García Vilasánchez y que traerá cambios de responsabilidades a nivel directivo y también en los métodos de trabajo. Un día después, se refrendará el organigrama en el consejo que celebrará su accionista, la SEPI.

A un día de la primera huelga del metal provincial desde hace un cuarto de siglo

Los paros se desarrollarán los días 22 y 27 de este mes y el 4 y 5 de julio, pero se inician a las diez de la noche de la jornada anterior para los turnos de noche

B. Couce

Hace un cuarto de siglo que el sector siderometalúrgico de la provincia no se enfrenta a una huelga, pero si las negociaciones entre las partes no se reactivan, a las diez de la noche de mañana miércoles dará comienzo la primera de las cuatro jornadas de paro convocadas por los sindicatos CIG, CC. OO. y UGT por el convenio colectivo. Los paros se desarrollarán los días 22 y 27 de este mes y el 4 y 5 de julio, pero se inician a las diez de la noche de la jornada anterior para los turnos de noche.

Mon Afonzo, de la Federación de Industria de la CIG, recordó que uno de los puntos de discusión entre las partes es la reivindicación de volver a incluir la cláusula de revisión salarial en el convenio, ya que el actual no lo tiene. «O bloqueo ás negociacións, á patronal lle está saíndo gratis», criticó. Además, reprochó a los empresarios usar medias verdades al decir que aceptan demandas sindicales cuando los matices son importantes. En este sentido, explicó que los portavoces de las plantillas -son 16.000 trabajadores en el sector provincial- quieren limitar el empleo reclamado a través de ETT solo a períodos punta de la actividad, cuando la patronal oferta que esos períodos sean durante doce meses. La inclusión de los acuerdos de las auxiliares de Navantia en el convenio, la subrogación de las plantillas de mantenimiento y la vigilancia social del trabajo de las mutuas son otros de los puntos a los que no renuncian los sindicatos.

En Ferrol, la plantilla de Navantia respalda la manifestación del sector, que partirá el jueves a las doce de la plaza de España.