Dos mujeres y un hombre perdieron la vida de forma cruenta en Ferrolterra en un período de 117 días. En todos los casos el arma del crimen fue un cuchillo o navaja
02 may 2016 . Actualizado a las 07:43 h.En menos de cuatro meses, concretamente en un intervalo de 117 días, tres personas murieron de forma violenta a manos de otras en la comarca de Ferrol. Este hecho supondrá, sin lugar a dudas, una mella en la tasa de criminalidad de la zona, que en 2015 había mejorado sensiblemente, con una bajada del 0,5 % respecto al año anterior.
Caridad Pérez Calderón, de 79 años, apareció degollada en su domicilio de O Couto, en Narón, el día 29 de diciembre de 2015. Su marido, Juan Fraga Allegue, de 79 años, permanece en prisión desde el 13 de enero del 2016 como presunto autor de este deceso, aunque él se manifiesta inocente.
La segunda muerte trágica se produjo en la madrugada del pasado día 12 de marzo. Ocurrió en el transcurso de la celebración de la fiesta del sexto cumpleaños de un nieto de Juan el Gitano, que se desarrolló en un restaurante de Serantes, en Ferrol, y a la que estaban invitadas 200 personas de etnia gitana, aunque al final acudieron cerca de 400. En ese marco se produjo una reyerta multitudinaria en la que resultó apuñalado de muerte en un costado Jesús Rivero Conchado, de 39 años, vecino de A Coruña, uno de los que habían acudido sin invitación. Por este suceso se encuentra en prisión desde el 16 de marzo el patriarca de Los Morachos, Manuel Salazar Camacho, de 73 años, con domicilio en las inmediaciones del polígono industrial Río do Pozo, en Narón, que confesó la autoría del crimen, aunque alegó defensa propia.
El último homicidio-asesinato se produjo en la madrugada del pasado lunes, día 25. La víctima fue Marta Sequeiro Valencia, de 43 años, que apareció acribillada a puñaladas en el bar Bonky, en el barrio de Telleiras, en Ferrol. Esa misma mañana la Policía Nacional detuvo al presunto autor del crimen, Víctor Timiraos Navarro, de 32 años, domiciliado en la carretera de San Xoán, en Ferrol. El investigado, que ingresó en prisión provisional el pasado miércoles, reconoció haber cogido un cuchillo en el bar en el que ocurrieron los hechos y tener un forcejeo con la víctima, pero insistió en que no recordaba nada más porque estaba ebrio.
Las tres causas que instruyen los juzgados de Ferrol se encuentran todavía en fases iniciales. En el caso del crimen de O Couto, la defensa del investigado está a la espera de que la Audiencia Provincial de A Coruña resuelva el recurso de apelación en el que se pide la salida de prisión del marido de la víctima, que fue denegada por el juez instructor.
Por su parte, la causa del apuñalamiento mortal de Jesús Rivero Conchado está en fase de realización de pruebas. La acusación particular, ejercida por la familia del fallecido, tiene previsto solicitar una nueva imputación, basándose en el visionado de la grabación del restaurante, en la que, supuestamente, se ve a otra persona entregar el cuchillo o la navaja al patriarca de Los Morachos.
Respecto a la última muerte, el detenido, que regentaba el bar Auditorio 27, situado a 500 metros del local en el que se produjo el crimen, acaba de ingresar en prisión y lo único que se ha tramitado es su declaración en sede judicial.