El centro es el único en un programa de mejora de conocimientos para la excelencia
15 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El colegio de Recimil cuenta con una nueva mascota, se llama Escornabot y la han creado unos alumnos bien aventajados, porque participan con mucho éxito en un programa educativo que combina la programación con la robótica y no pocos conocimientos más para llegar a la excelencia en el conocimiento. Es una de las opciones que da la Xunta en sus contratos programa y en Ferrol es el único centro educativo con esta posibilidad.
Los alumnos de quinto y sexto de Primara están volcados con un modelo educativo que es posible porque los profesores del centro han ido antes a clases al Centro de Formación de Profesorado y la directora, Vivi Suárez Taibo, realizó todos los trámites para instaurar una opción que cuenta con muchos alicientes. «Durante un curso son los alumnos de dos cursos los que estudian estos conocimientos y después son ellos mismos los encargados de enseñárselos al resto de clases, eso crea una expectativa y un interés especial en el centro», cuenta Genoveva Valeiro, la tutora que lleva el programa.
Escornaois y un robot
Explica esta docente que programar es lo que más gusta a sus pupilos y que progresan muy bien tanto en esta área, como en otros contenidos, como las matemáticas. Estas nuevas materias están funcionando como un aliciente para todas las asignaturas. «Hemos creado un robot que se llama Escornabot, porque es una mezcla entre escorbabois y robot», explica sobre un personaje que puede funcionar hasta en las asignaturas de letras, para ordenar alfabéticamente por ejemplo.
Tanto la directora, como la tutora que lleva esta asignatura aseguran que la robótica se integra en todas las materias y supone un plus tanto para la enseñanza de los contenidos, como para la motivación de los niños. «Ni se dan cuenta de que están aprendiendo, es un juego para ellos», precisa una profesora que apunta que es un revulsivo para los estudiantes que estaban atascados con alguna materia.
Cada semana se imparten una serie de clases que el resto del centro mira con ciertos celos y están deseando incorporar, según reconocen los propios docentes. De hecho, muchos otros profesores están formándose para poder adoptar este sistema.
Los contratos programas de la Xunta suponen una ayuda económica a los centros que se comprometan a trabajar en alguna de las seis líneas que ofrecen (desde clases de refuerzo, a mejora de las competencias, de la igualdad en el centro y del abandono escolar temprano). Sin embargo, Recimil es el único de Ferrol que ha conseguido la línea de la mejora del conocimiento para lograr la excelencia y que, además, está logrando resultados muy buenos.
Ayuda para el instituto
Otra de las cuestiones que pesó a la hora de incorporar esta innovación educativa es que en muchos institutos de Ferrol ya se imparte robótica, como es el caso de uno de los más cercanos, el Concepción Arenal. «Así los niños llegan con cierta ventaja, es una ayuda de cara al cambio de centro», apunta la tutora de los pequeños que desde febrero están encantados con estas clases y que pronto explicarán a sus compañeros. «Esta actividad es solo una muestra del montón de cosas positivas que tenemos en el centro», recalca la directora que anima a los padres a elegirlo de cara la próxima matrícula.