Podría empezar con la misma frase con la que se inicia la proyección televisiva de muchas películas: «Esta historia está basada en hechos reales». Pero lo que cuento no es una película. Se trata del relato de algo, igual o parecido, que, aunque no esté generalizado, ocurre con más frecuencia de la que sería disculpable, cuando un ciudadano se acerca a la ventanilla de una institución pública para realizar una gestión. Por eso lo cuento. Si fuese una excepción no tendría relevancia. Y, para no divagar, debo aclarar que sucedió en el Concello de Ferrol, en concreto en el Registro. Y lo comento porque se trata de una falta de profesionalidad y una desconsideración al ciudadano, que debe ser corregida y su responsable advertido. El hecho me lo cuenta un amigo, absolutamente fiable, que se acercó a registrar un documento que le demandó la Administración. Lo entrega y lo primero que le advierten es que no incluyó el DNI; cuando está anotándolo le añaden que no, que tiene que hacer un documento nuevo… A continuación, que va dirigido a la Concejalía de Urbanismo y que la denominación es incompleta (No escribo el larguísimo nombre oficial porque, como lo cambian con frecuencia, es probable que cuando lean esta bitácora, ya sea otro). Lo siguiente es que, además, debe concretar el destinatario etc... Desconozco cuántos negociados (o como se llamen) hay en ese departamento, pero sugiero que nos envíen un libro de instrucciones del organigrama del Concello que incluya personal y competencias. Y que, dados los continuos cambios, lo actualicen de oficio. La guinda final fue la manifestación de asombro del, o la, responsable, cuando mi amigo le recriminó su actitud. ¡No entendía qué le molestaba!….
PD: Sugiero que se cree la figura de Asesor para cubrir impresos destinados al Concello de Ferrol. Igual se anima algún emprendedor con experiencia en intentar crear un negocio y toparse con: LA BUROCRACIA.