El cura de Mugardos que anuncia los entierros y misas a golpe de Facebook

MUGARDOS

CESAR TOIMIL

Dice que la Iglesia tiene que estar con las nuevas tecnologías para llegar a más gente

29 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Mientras algunos curas mayores no abandonan la sotana y los más progres utilizan vestimentas que no los diferencias del resto de los mortales, José Carlos Mato Tosar (A Estrada, 1974) opta por un término medio: Viste traje oscuro y alzacuello. Es el sacerdote que está al frente de la Unidad Pastoral integrada por las cuatro parroquias del municipio mugardés: San Julián de Mugardos, Santiago de Franza, San Vicente de Meá y San Juan de Piñeiro.

Desde muy pequeño le llamaba el sacerdocio, pero no ingresó en el seminario de Santiago hasta los 21 años, «gracias a la mediación de sacerdotes que me ayudaron a responder y ser feliz ante la llamada de Dios».

Tras seis meses en parroquias pequeñas de la zona de A Estrada, José Carlos llegó a Mugardos y, con él, la aplicación de las nuevas tecnologías y las redes sociales. Comenzó comunicándose con sus feligreses a través de una página web, pero desde el 2014 ya casi no registra actividad, porque su lugar fue ocupado por el Facebook. En la actualidad tiene unos 800 seguidores y cada día se registran varias incorporaciones.

A través de este sistema anuncia los entierros que tienen lugar en sus cuatro parroquias, facilitando el nombre del fallecido, su lugar de residencia y la hora de las actos fúnebres. Su iniciativa es muy bien acogida por sus seguidores, que aprovechan el mismo medio para hacer públicas sus condolencias a la familia y expresar un DEP para el difunto.

Pero el Facebook del sacerdote José Carlos no solo se nutre de defunciones y funerales, sino que también publica los actos religiosos que se celebran cada día, las obras que se realizan en las parroquias, sus gestiones ante el Concello, los mensajes del Papa, las campañas contra el acoso escolar e incluso deja entrever los gustos musicales de su titular. Y es que, además de temas clásicos y religiosos, el párroco también comparte vídeos con canciones del momento, como Perdóname, de Pablo Alborán; o Súbeme la radio, de Enrique Iglesias.

Su apuesta por el Facebook tiene por objeto llegar al mayor número de seguidores posible. «Si queremos llegar a muchos sitios, tenemos que estar con las nuevas tecnologías, no nos podemos contentar con como se hacían las cosas siempre», manifiesta, añadiendo que se trata de una ventana que abre muchas posibilidades. José Carlos califica el Facebook como «una parroquia virtual», y asegura que, de este modo, gente que solo reside en Mugardos durante las vacaciones del verano y Semana Santa lo sigue desde Madrid y otras localidades del resto de España.

Lo considera fundamental, asimismo, para mantener el contacto permanente con sus feligreses que, por razones de edad o enfermedad, ya no pueden salir de casa. «Siempre hay algún hijo o un nieto que los conecta con Internet y, por ejemplo, pueden ver las fotos de cómo se decoró la iglesia a la que acudió toda la vida para una celebración determinada», apostilla.

Pero la alimentación del Facebook no es la única forma que tiene José Carlos de llegar a sus feligreses, porque, en una época en la que, por la falta de vocaciones, en algunas zonas se redujeron las celebraciones religiosas, él, que vive solo y se encarga de las cosas de su casa, sigue oficiando tres misas a diario de martes a sábado y cuatro los domingos.

Respecto al descenso de los ingresos en los seminarios, el párroco de Mugardos manifiesta que «Dios sigue llamando a los jóvenes. Siempre hay vocaciones, aunque podría haber más», pero, a su modo de ver, hay inconvenientes que pueden frenar que sigan adelante.

Se refiere a los familias que las obstaculizan, al contrario de lo que ocurría antes, cuando tener un pariente cura era un orgullo. «A pesar de esos obstáculos, muchos jóvenes responden y después los padres están contentos de tener un sacerdote», apostilla.