Remo del Támesis inglés en aguas de Castrelo de Miño

Luis Manuel Rodríguez González
luis m. rodríguez OURENSE / LA VOZ

FIRMAS

Santi M. Amil

El Thames Rowing Club se entrena en aguas ourensanas

04 abr 2012 . Actualizado a las 12:40 h.

El Thames Rowing Club es una de las entidades deportivas más antiguas de Londres, donde el remo es religión. La entidad, fundada en 1860, tiene su sede al oeste de la ciudad, en el embarcadero de Putney, y es una de las más laureadas, sobre todo en las categorías femeninas.

Para su concentración anual, la expedición procedente del Reino Unido optó por Castrelo de Miño y, durante esta Semana Santa, se mantiene concentrada con noventa personas, entre deportistas, técnicos y personal de servicios en las instalaciones del Parque Náutico de Galicia.

En pleno corazón de O Ribeiro, las jornadas de trabajo son intensas. Entre las 7 y las 7.30 horas se inicia un desayuno que da paso a la primera sesión de entrenamientos, a eso de las 8.30, antes de encarar el primer descanso matinal.

El segundo turno preparatorio suele iniciarse a las 11.30, y la comida en el club, alrededor de las 13.30 horas. Un merecido descanso abre el último ensayo del día, más allá de las 17 horas, para reunir de nuevo al grupo en la cena, a partir de las 20 horas.

Aunque los entrenadores pueden suprimir alguna de las sesiones, según el volumen de trabajo desarrollado, y también se programe una visita turística en los próximos días, la planificación es exigente y la mayor parte del esfuerzo se lleva a cabo en el agua. Precisamente uno de los técnicos del Thames, Ternie Lockman, destacó la bondad del líquido elemento en el embalse: «Es muy buena para remar y es muy práctico contar con una pista como esta de 2.000 metros y además la posibilidad de remar largas distancias».

En busca de la tranquilidad

Gabriel Fernández, director técnico del club ribeirao, explica que «tienen la posibilidad de recorrer distancias de hasta veinte kilómetros en una sola vuelta». La primera experiencia de los londinenses se ubicó en el centro de alto rendimiento en Sevilla y por eso solicitaron informes a la Federación Española de Remo, que les recomendó tanto Banyoles -donde ya han remado también- y Castrelo de Miño.

La localización gallega fue elegida sobre todo por su tranquilidad y las buenas condiciones de la pista, pero también por esa opción de afrontar trazados de largo recorrido, sin aburridas vueltas a un circuito; según reconocían, entre otros, los españoles que militan en la formación anglosajona, el remero Miguel Llanos y la timonel Carlota Berruezo. Esta última fue la que escribió los primeros correos electrónicos en los cuales la agrupación londinense se interesaba por precios y fechas libres para recalar en Castrelo de Miño.

Entre el albergue y alguna de las casas rurales del municipio se reparte un contingente que ha dejado una clara huella británica en el occidente ourensano. Basta con observar la gran cantidad de mantequilla que vuela por el comedor entre mesa y mesa. Con todo, los integrantes de la escuadra remera se sienten como en casa, como recuerda el ya citado Lockman: «La gente que nos rodea es maravillosa y el alojamiento es muy bueno para la concentración, todo es muy agradable». Y es que el lenguaje del deporte es universal, sea en Londres o Galicia.

«La gente que nos rodea es maravillosa y el alojamiento es muy bueno para la concentración»

Entrenador