Crítica de arte
09 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Como cada año desde hace diecisiete, podemos visitar en la Casa de la Cultura de Pontedeume, antiguo convento de San Agustín, la muestra ArtXove en donde se dan cita artistas jóvenes de toda Galicia. Sin duda es esta una muestra única en su categoría pues, como bien es sabido, no hay una selección de obras ni autores que en ella participan, se admiten todos y del mismo modo, todos aparecen en el catálogo que anualmente se edita. Pintores, Escultores, Fotógrafos, y desde hace pocos años, Joyeros, conforman el nutrido grupo de creadores, este año un total de sesenta y ocho, que nos hacen partícipes de sus trabajos a través de esta siempre exitosa convocatoria, en la que como comentan los organizadores, sus expectativas de participación año tras año son superadas.
En esta ocasión es el escultor Manuel Patinha quien se ha hecho cargo de la presentación de la muestra y que podemos leer en las primeras páginas del catálogo, el cual de forma gratuita nos ofrecen a la entrada de la exposición. Patinha escribe sobre sus comienzos como artista, habla de sus primeras inquietudes y expectativas en el complicado mundo del arte y sobre todo habla de la importancia que el trabajo y la perseverancia han tenido en la consecución de su éxito. También alude al momento crítico en el que vivimos en donde la crisis económica hace, si cabe, más difícil el acceso a los jóvenes al mercado artístico, agradeciendo a instituciones y ciertos sectores privados el esfuerzo económico que están haciendo.
ArtXove nos va mostrando, ahora y a lo largo de los años de su existencia el activo artístico que en Galicia tenemos, echando la vista atrás podemos comprender los inicios del trabajo de tantos creadores que han ido pasando por las salas de la Casa de la Cultura de Pontedeume. Este año, y de Ferrol, está Laura Lago Bellas, que ya colgó su obra en el Torrente como joven apuesta y que actualmente participa en una colectiva en el Centro Cívico de Caranza; colores amables, formas sencillas, imágenes infantiles y elementos propios de la costura en su sentido más tradicional hacen que los cuadros de esta pintora destaquen de forma llamativa, y en ocasiones resulten ligeramente inquietantes. Otra ferrolana que incluye la costura en sus obras es Paula Porta Vázquez, elemento que a finales de los sesenta las artistas feministas utilizaron como diferenciador de sus obras.
En el apartado de Fotografía está Rita Gutiérrez Rivera que nos presenta una foto en color en donde la cabeza de un conejo y unos zapatos de tacón protagonizan una surrealista imagen; y también ferrolano es Carlos López Golpe que aporta una instantánea de un día soleado en el Louvre. Y de Laura Moledo, de Neda, es una foto b/n llena de poesía en donde parece cantar el agua de las fuentes.
De Pontedeume y dentro del apartado de escultura está Leticia Gómez con la colorista puesta en escena de una mesa llena de apetitosos dulces que nos remiten inevitablemente a las vitrinas POP de Oldenburg con el añadido de unos bichitos también falsos que nos hacen reflexionar sobre las apariencias, como su título indica. Tantas visiones como artistas, todas ellas válidas y originales, distintas, frescas, indicativas del continuo bullir del mundo del arte, tan necesario, tan útil.
crítica de arte
Casa de la Cultura de Pontedeume
Hasta el 15 de abril
De 6 a 8 de la tarde