Dorribo restaura un molino en Begonte para usarlo como vivienda

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

FIRMAS

Óscar Bermúdez

La hija del empresario fue preguntada ayer en el juzgado por la renta que paga por él

16 may 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El empresario Jorge Dorribo está restaurando un molino en la parroquia de Cerdeiras, en Begonte, para utilizarlo como vivienda. El industrial tiene fijadas su residencia en Alicante, donde montó una empresa su hija Anthea, que ayer declaró, en calidad de testigo, ante la jueza Estela San José, y habló del molino de Begonte.

La primogénita de Dorribo fue interrogada sobre la renta que paga por el alquiler con opción de compra de la construcción. No aludió a la cantidad, se limitó a señalar que es una propiedad de la empresa -Improsan Pharma, de Alicante, es la que ella regenta y en la que su madre ejerce de contable- que es la que paga el alquiler.

El molino de Begonte es propiedad de una firma que pertenece al industrial lucense Luis Abelleira.

Dorribo está restaurando el molino y vallando la propiedad, con la intención de vivir en él en sus frecuentes desplazamientos a Lugo. Antes tenía fijada su residencia en un chalé de Santa Mariña, en O Corgo, que está embargado. De la finca desaparecieron hasta las vallas que rodeaban el recinto, lo que obligó a la jueza encargada del caso a abrir unas diligencias por alzamiento de bienes.

En uno de los tomos del sumario de la operación Campeón aparecen varias referencias a la casa de Santa Mariña, con fotografías de cómo quedó después de que varios camiones sacaran mercancía de allí. En la documentación figuran las matrículas de los vehículos en los que se llevaron las piezas.

El empresario, antes de su detención, estaba preparando su marcha para instalarse en Andorra, donde pretendía desarrollar una actividad similar a la de Lugo. El inicio de la operación policial, en mayo del pasado año, frustró sus planes en el Principado. Al salir de prisión trasladó su domicilio fuera de Lugo y optó por el molino para tener un lugar en el que alojarse en sus frecuentes viajes.