Los vecinos han denunciado en varias ocasiones vertidos fecales Dice que la mala gestión de las depuradoras ha afectado a la salubridad del marisco
11 abr 2007 . Actualizado a las 07:00 h.La Consellería de Pesca responsabilizó ayer a los ayuntamientos de la comarca de O Val Miñor de la contaminación microbiológica de la ensenada de Baiona. Portavoces de ese departamento autonómico aseguraron que los mariscadores no son culpables de los vertidos y que la única causa que puede explicar el paro forzoso es el mal funcionamiento de las plantas depuradoras, cuya gestión corresponde a los Gobiernos locales. El Ayuntamiento de Gondomar es uno de los que más contaminan la bahía. Las aguas residuales de los núcleos urbanos de la ribera del río Miñor llegan al mar sin depurar, porque la estación de tratamiento de este concello sólo filtra el 30% de las aguas que recibe, según los datos de la cofradía de pescadores. El sistema general de saneamiento también es deficitario en el municipio de Nigrán. Los vecinos han denunciado con frecuencia vertidos a través del río Muíños, que separa el arenal de Panxón y playa América. Por otra parte, el emisario submarino de esta localidad está averiado, lo que provoca fugas en las cercanías de la costa. Baiona no tiene ninguna estación depuradora, a pesar de ser un municipio turístico que presume de sus arenales. Las aguas residuales se lanzan al mar desde una estación trituradora y de bombeo a dos millas de la costa. El emisario de esta localidad también presenta varias roturas en su trazado. El Concello detectó la avería hace cinco años, pero nunca ha encargado ningún tipo de arreglo. El problema de la contaminación de la ensenada ha aumentado durante los últimos años debido a que el enorme crecimiento inmobiliario que ha experimentado la zona no se ha visto acompañado por una suficiente cobertura de servicios básicos. Crecimiento Los municipios de Baiona, Nigrán y Gondomar han pasado de tener 20.207 viviendas en el año 2000 a las 24.926 que estaban registradas en el 2005. El problema de la contaminación se agrava especialmente al llegar la temporada de verano, cuando la comarca de O Val Miñor llega hasta cuadruplicar su población. Mientras tanto, portavoces de la Consellería de Pesca no pudieron ayer precisar cuánto tiempo durará el cierre provisional de la ensenada de Baiona. La Xunta efectúa controles semanales, pero estiman que los pescadores estarán como mínimo un mes sin poder salir a faenar en el área. La medida afecta a más de 90 marineros adscritos a la Cofradía de Pescadores de Baiona.