El control de las especies que dañan el marisco permitirá, sin duda, aumentar el rendimiento Biólogos de la Xunta estudiarán cómo actúan los depredadores y cómo mitigar su acción
12 may 2007 . Actualizado a las 07:00 h.Las cifras no dejan sombra de dudas: Galicia es una potencia marisquera. El pasado año, sin ir más lejos, se extrajeron 7.300 toneladas de bivalvos de las playas. Pero esa cantidad es sólo una pequeña parte de lo que el mar gallego podría dar. Un estudio realizado por la Consellería de Pesca en el 2005 indica que los mariscadores sólo están retirando de los bancos un 6% del producto que podrían recolectar. Fenómenos naturales como las riadas, patologías y contaminación son algunos de los factores que impiden que las rías rindan al cien por cien. Pero en eso también tienen algo que decir los depredadores de marisco: animales que buscan en almejas y berberechos los aportes de biomasa que necesitan para seguir vivos. Dispuesta a dar pasos para «convertir a extracción de bivalvos nos bancos marisqueiros nunha moderna acuicultura», la Consellería de Pesca ha decidido empezar a dar pasos para conocer cómo operan esas especies que compiten con los mariscadores gallegos y, de esa forma, definir las mejores estrategias defensivas. Los científicos del Centro de Investigacións Mariñas (Cima) que realizarán este estudio contarán con poca bibliografía al respecto. Pero dispondrán, eso sí, de un buen puñado de conocimientos atesorados por el sector durante años y años de batalla contra los depredadores. Todos esos conocimientos no están organizados y, de hecho, son pocas las cofradías que ponen en marcha campañas de control de estas especies. Una de las que lo ha hecho ha sido Cambados, que ha logrado, en un año, duplicar la producción de babosa en uno de sus bancos mediante la sencilla táctica de extraer cangrejos y caracolas del mismo antes de proceder a la siembra de semilla. Experiencias como la atesorada por los mariscadores cambadeses serán muy útiles a los técnicos que durante los próximos tres años intentarán encontrar las mejores fórmulas para luchar contra los depredadores sin alterar la cadena trófica de las rías gallegas. Los científicos dedicarán buena parte de su tiempo a conocer las costumbres de estas especies, las horas a las que se alimentan, y cuál es su incidencia sobre los bivalvos de interés comercial. Luego, realizarán los trabajos para «coñecer a eficacia, operatividade óptima e implicacións ecolóxicas de cada técnica de prevención e protección que se están a utilizar na actualidade». Con todos esos datos en la mano, los científicos intentarán «diseñar novas liñas de prevención e protección, e optimizar as actualmente dispoñibles». Divulgación «Divulgar e formar aos produtores e cultivadores nestes coñecementos» es el último paso de este ambicioso proyecto científico, que se construirá sobre el control de los parques de cultivo de Carril y los bancos marisqueros de Vilaxoán, A Illa y Ribeira. Los datos y conocimientos extraídos de esas zonas se complementarán con los que saldrán de un entorno controlado: los tanques del acuario de O Grove.