Interrogados tres tripulantes de una zódiac hundida frente a A Guarda
GALICIA
Los marineros, de Vilanova y Cambados, pidieron auxilio tras sufrir una vía de agua Un pesquero luso los salvó de noche antes de que la barca, de tres potentes motores, se fuese a pique
11 jul 2007 . Actualizado a las 07:00 h.Los tres tripulantes de la embarcación semirrígida neumática Lucía fueron rescatados frente a la costa de A Guarda tras sufrir una vía de agua y pedir auxilio por radio a las 2.45 horas de ayer. El punto del naufragio fue a 15 millas del sur de A Guarda, en aguas portuguesas. El pesquero luso Justino Ramalleira les abordó de costado y transbordó a los náufragos. Al llegar a Cangas horas después, los marinos fueron interrogados y puestos en libertad. La zódiac, de 11 metros de eslora y tres motores de 200 caballos cada uno, se hundió sin dejar opciones a la Guardia Civil para verificar su carga. Otras fuentes señalan que una fragata portuguesa optó por hundirla para evitar accidentes en el tráfico marítimo. El buque de Salvamento Marítimo Salvamar Mirach salió de su base en Cangas sobre las tres de la madrugada para recoger a los marineros gallegos. También intervino el helicóptero Pesca I, de la Xunta. El barco de salvamento regresó a puerto, con los náufragos, sanos y salvos, pasadas las diez de la mañana, y atracó en la punta del muelle de pesca. Dos de los tripulantes son los hermanos Diego y José Luis J. M., de 28 y 36 años, respectivamente, vecinos de Vilanova de Arousa y sobrinos de Antonio Jueguen del Río, Toutou, implicado en juicios por narcotráfico. El tercer náufrago es José Manuel C.H., vecino de Cambados. Todos ellos carecen de antecedentes. Según confirmó la Subdelegación del Gobierno de Pontevedra a Europa Press, hasta el lugar del naufragio también se desplazó la policía portuguesa. Los lusos temían que en la embarcación se cometiera alguna irregularidad, especialmente relacionada con el tráfico de estupefacientes en la zona. La Guardia Civil quiere abrir una investigación para aclarar el incidente.