La presión vecinal fuerza el cierre del aeródromo particular de Godos

Cristina Barral Diéguez
Cristina Barral PONTEVEDRA

GALICIA

Los participantes en la primera etapa de la Volta Aeronáutica a Galicia ya no pudieron aterrizar

14 jul 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Un grupo de vecinos de Godos (Caldas de Reis) se concentraron ayer a primera hora de la tarde en el camino público que cruza la pista de aterrizaje del aeródromo de Regengo, construida sin licencia y en suelo rústico. Los participantes, entre los que se encontraban miembros de Izquierda Unida y del BNG, portaban una pancarta con la leyenda «Godos contra a ilegalidade». La intención ciudadana era expresar su rechazo al funcionamiento de unas instalaciones que califican de ilegales y desde las que despegan y aterrizan avionetas y ultraligeros desde hace muchos meses. A los vecinos se sumó poco después el alcalde de localidad, el socialista Juan Manuel Rey, acompañado por el concejal de Godos José Fuentes. El regidor no ofreció a los opositores al aeródromo buenas palabras, sino que se presentó en el lugar con la orden de precinto en la mano. Antes de tomar esta decisión, el político había consultado con el asesor jurídico del Ayuntamiento e incluso con la Consellería de Política Territorial. El decreto municipal ordena el precintado de las obras, instalaciones y elementos auxiliares del aeródromo, fijando la fecha del precinto para las diez de la mañana del próximo 19 de julio, jueves. La resolución se trasladó al promotor del campo de vuelo para aeronaves ultraligeras, el empresario José Manuel Campañó Luna, a la Policía Local y al director xeral de Urbanismo, Ramón Lueje. El alcalde quiso leer a los vecinos que estaban concentrados los pasos dados por el Concello desde que en el abril del 2005 se dictó la suspensión de las obras por carecer de licencia municipal. Entonces, los trabajos consistían en la explanación y nivelación de un terreno con aporte y acopio de material. La parcela en cuestión, situada entre el río Umia y el Camiño Francés, está clasificada como de suelo rústico. Pese a que el Ayuntamiento remitió el expediente a la Consellería de Política Territorial, porque en caso de concederse la licencia necesitaría autorización previa de la Xunta, el empresario siguió adelante con las obras. Esto motivó la apertura de un expediente de reposición de legalidad por parte de Política Territorial, que declaró las obras ilegales, ordenando al promotor a devolver los terrenos a su estado anterior. José Manuel Campañó presentó un recurso de alzada contra esta decisión, que todavía no se resolvió, según indicaron fuentes del departamento autonómico. Sin embargo, el empresario optó por asfaltar la pista de aterrizaje el pasado 6 de julio para poder albergar la primera etapa de la Volta Aeronáutica a Galicia (Portugal-Godos). Festival Cultura Quente La inclusión de esta prueba en el festival que organiza el Concello de Caldas fue lo que provocó la indignación vecinal. Ayer los ánimos quedaron más calmados tras formalizarse la orden de precinto.