Un pacto con el fiscal pone fin a una causa de tráfico de drogas abierta hace 11 años

pontevedra / la voz

GALICIA

Los imputados por la operación Javillo aceptaron ayer en Pontevedra penas de entre 6 y 21 meses de cárcel

13 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La Audiencia de Pontevedra dio ayer carpetazo a uno de sus procedimientos judiciales más antiguos, el relativo a la operación Javillo. Se trata de una investigación que en el 2001 impulsó desde Vilagarcía el juez Vázquez Taín contra lo que se suponía que era una red de tráfico de heroína que operaba en Galicia.

Once años más tarde, los trece encausados han llegado a un acuerdo con el fiscal antidroga que, aparentemente, se formalizó ayer en la Audiencia. Los acusados aceptaron penas que oscilan entre los 6 meses y el año y 9 meses de prisión, mientras que las multas más elevadas ascienden a 12.000 euros.

Según trascendió, todos ellos aceptaron el escrito de acusación. Las fuentes consultadas precisaron que ahora se está pendiente de que los magistrados de la ciudad del Lérez plasmen esta conformidad en una sentencia, algo que podría tener lugar en los próximos días.

Funcionario de prisiones

El acuerdo suscrito conllevó que todos los encausados, excepto uno, reconociesen su participación en un delito de tráfico de drogas. Al único que no se le imputó es un empleado de prisiones acusado de cohecho por introducir en la prisión de A Lama un móvil camuflado en una radio previo pago de 3.000 euros.

Este delito le ha supuesto, en principio, 6 meses de prisión y 2 años de suspensión de empleo o cargo público. También se le impuso medio año a la persona que le abonó los 3.000 euros, pena que se suma al año y medio que, aparentemente, asumió por el delito contra la salud pública.

La operación Javillo se inició en octubre del 2001 al tener constancia la Guardia Civil de que un matrimonio vendía estupefacientes en localidades de Pontevedra.