El sábado, Galicia perderá la influencia anticiclónica. Caerán algunas lluvias, aunque de carácter muy débil, y bajarán las temperaturas máximas
17 abr 2014 . Actualizado a las 15:32 h.Los festivos de la Semana Santa llegan acompañados de sol y calor, una primavera de lo más agradable tanto para quienes deseen participar en las procesiones como para los que opten por el descanso y la playa. Hoy jueves y mañana viernes las temperaturas rozarán en algunos puntos los treinta grados, y alcanzarán los 25 de máxima prácticamente en toda la comunidad.
Galicia sigue, por el momento, bajo la influencia anticiclónica, que hará que hoy jueves los cielos estén poco nubosos o despejados. La excepción será el litoral norte, donde predominarán las nubes bajas con nieblas costeras. En el norte de Lugo las temperaturas descenderán ligeramente, pero en el resto del territorio gallego volverán a ser altas. En Ourense se prevé que lleguen a los 29 grados; en Pontevedra y Lugo, a los 25; en Santiago, Ferrol y Vigo, 24, y en A Coruña, 21. En cuanto a las mínimas, se mantendrán por encima de los diez grados, salvo en Lugo, donde la previsión es que alcancen los 9.
Mañana viernes continuarán las temperaturas altas, e incluso subirán en algunos puntos, como en A Coruña, donde está previsto que lleguen a los 23, o en Ferrol, donde se esperan 25. Sin embargo, las altas presiones que han dejado sol y calor durante los últimos días comenzarán a debilitarse, y las bajas presiones del oeste harán que comience a entrar aire más húmedo e inestable. En consecuencia, los cielos arrancarán el día con pocas nubes e irán cubriéndose por la tarde, cuando pueden caer algunos chubascos tormentosos. El tiempo se irá estropeando progresivamente, de manera que por la noche entrarán algunas precipitaciones livianas desde el oeste.
Ese empeoramiento se acentuará el sábado, jornada en la que Galicia perderá definitivamente la influencia anticiclónica y en la que caerán algunas lluvias, aunque de carácter muy débil, y bajarán las temperaturas máximas.
Domingo inestable
El domingo será el día en que esa borrasca pase más cerca de Galicia, de manera que quizás sea la jornada más inestable de las vacaciones. De todos modos, se trata de un frente muy débil, que traerá poca lluvia y que no impedirá disfrutar del aire libre, cuajando uno de los mejores períodos de Semana Santa de los últimos años.