«Ya vino un milagro. A ver si viene otro»

Miguel Ascón Belver
miguel ascón OURENSE / LA VOZ

CUALEDRO

La nuera y el hijo de la anciana perdida en Cualedro buscan trabajo para poder cuidarla

21 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

La familia de Esperanza Fernández Rodríguez empieza a recuperar el aliento. La mujer, de 76 años y enferma de alzhéimer, se había perdido cuando el pasado martes salió de su casa en el municipio ourensano de Cualedro para dar un paseo matutino. No apareció hasta el viernes por la tarde, cuando ya muchos habían perdido la esperanza. De hecho, su nuera explicaba ayer que justo antes de que apareciese le comunicaron a la familia que en una hora se suspendería la búsqueda. Fue en ese momento cuando un grupo la encontró y, sorprendentemente, solo tenía unos arañazos. Fue llevada al hospital para un reconocimiento y desde allí sus familiares más cercanos quisieron enviar un mensaje a todos los que ayudaron. «Hemos sentido la fuerza del cariño y la solidaridad y nos hemos reforzado en la idea de lo que es capaz de conseguir el ser humano cuando une sus fuerzas», dice su carta.

Esperanza seguirá en el hospital unos días más puesto que, casualmente, le han diagnosticado una diabetes. Después, con la ayuda del Concello, se le buscará un centro adecuado a sus circunstancias para internarla. Su hijo, que vive en Rairiz de Veiga, a 34 kilómetros, está reformando una casa, pero tuvo que parar las obras porque él y su mujer se quedaron en el paro. Ella, que es auxiliar de geriatría -especializada precisamente en alzhéimer-, espera un golpe de suerte: «Ya vino un milagro. A ver si viene otro y encontramos trabajo para poder acabar la obra y llevárnosla a casa. Nadie mejor que yo para cuidarla».