La Policía Judicial de la Guardia Civil se encuentra a la espera de que la joven madre, que se halla hospitalizada en el Meixoeiro por las lesiones sufridas durante el parto y con un estado de salud mental problemático, pueda encontrarse en condiciones de prestar declaración sobre lo sucedido. Fuentes de la Guardia Civil precisaron que la joven se encuentra hospitalizada pero detenida, por lo que en cuanto sea posible será interrogada. A raíz de este interrogatorio y las diligencias posteriores, la autoridad judicial tendrá que confirmar si sigue detenida o es puesta provisionalmente en libertad.
En el entorno de la familia de la joven no quieren recordar los traumáticos sucesos, aunque tuvieron que facilitar algunos datos al hospital y a las fuerzas de seguridad.
La elaboración del atestado se puede prolongar por este motivo algunos días y no será hasta que se complete el informe de la Policía Judicial cuando las diligencias sean remitidas al juzgado de guardia de Tui.
El fiscal que lleva esta zona tuvo ayer que acudir a vistas orales y no tomó declaración a ninguno de los familiares. El representante del ministerio público señaló que antes de eso tiene que recibir los informes que le proporcione la Policía judicial de la Guardia Civil, que está efectuando la investigación y recabando los datos de todos los testigos. El representante del ministerio público señaló que una vez que la Guardia Civil remita a la Fiscalía de Vigo el informe del caso se incoará el procedimiento oportuno y se establecerá un calendario para realizar las pertinentes comparecencias y toma de declaraciones.
Agravante
Fuentes de la investigación señalaron que mientras en otros tipos de delito el parentesco es una atenuante, en este caso es una circunstancia agravante por lo que la calificación penal puede ser muy grave si, tal y como todo apunta, la mujer arrojó voluntariamente el bebé.