La agenda de la canciller alemana, Angela Merkel, recién regresada de sus vacaciones estivales, no podría estar más completa. Hoy tiene una cita en Kiev, con Petró Poroshenko y mañana domingo en Santiago de Compostela, con Mariano Rajoy. A Ucrania acude para dar un espaldarazo al presidente de ese país; a Santiago viaja por invitación expresa del presidente del Gobierno español, para conocer su tierra natal y caminar parte del Camino conjuntamente, seis kilómetros para ser exactos.
Aunque la visita de Merkel a Galicia se vende como un viaje personal, no deja de ser un viaje de carácter político. Superado está lo peor de la crisis en el sur de Europa y las fotos en la catedral de Santiago, que visitará el lunes, son siempre bien recibidas entre el electorado cristiano de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU). Aunque Merkel es hija de pastor evangélico y hace nueve años, cuando asumió el poder, era más reacia a los encuentros con la Iglesia católica, ha aprendido a coquetear con todas las confesiones, sobre todo las perseguidas, explican fuentes cercanas a la canciller a este diario. Es una entusiasta declarada del papa argentino, el jesuíta Francisco, añade esta fuente.
Tres citas electorales
En apenas diez días se celebran elecciones regionales en Sajonia, y en septiembre Merkel afronta otras dos citas electorales de carácter regional. ¿Qué mejor que dejarse fotografiar practicando una de sus aficiones favoritas? El senderismo es una de las actividades que comparte todos los veranos con su marido Joachim Sauer en Tirol del Sur, la provincia autónoma de Bolzano, en el norte de Italia, donde se habla tanto el alemán como el italiano. También en su pueblo natal de Hohenwalde, en un lugar perdido de Brandeburgo, donde descansa y se dedica sencillamente a pasear, nadar en los lagos cercanos y cuidar de su huerta.
El Camino, popular en Alemania
Y, ¿qué mejor que hacerlo en el Camino de Santiago, que tan popular se ha hecho entre los alemanes? Desde que el humorista alemán Hape Kerkeling publicara en 2006 Ich bin dann mal weg, su crónica personal sobre el Camino Francés, que recorrió cinco años antes para desconectar del estrés laboral y «reencontrarse», el número de peregrinos alemanes no ha dejado de aumentar. Convertido en un verdadero best-seller, con más de 4 millones de ejemplares vendidos, la crónica humorística del presentador sobre sus aventuras y desventuras durante el camino se prepara para dar el salto a la gran pantalla el año próximo. El rodaje con actores de primera fila tiene lugar estos días en Berlín, pero el mes que viene continuará en Galicia.
Aunque el grueso de los peregrinos tienen pasaporte español, entre los foráneos los más fieles son los alemanes (8,4% del total), seguidos de italianos, portugueses, norteamericanos y franceses. Ahora es el turno de una política, nada menos que una de las mujeres más poderosas del mundo. Angela Merkel recorrerá mañana seis kilómetros, después de ser recibida por su homólogo español. La jornada del lunes la dedicará a debatir temas bilaterales, tanto de política europea como internacional, con sus respectivas delegaciones. Sin olvidar la cita con la catedral de Santiago y su famoso botafumeiro. La foto es la foto.