Visualizar el final del camino

GALICIA

26 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Suele olvidarse que el Camino de Santiago -el original, no el actual, que debe más a Víctor Vázquez Portomeñe que al apóstol- era ante todo un camino de penitencia. No es seguramente esa la metáfora que tenía en mente Angela Merkel cuando le pidió al presidente Rajoy que la acompañase a andar juntos un tramo, pero el simbolismo está ahí de todos modos. De mano de la canciller alemana, España, en compañía de otros, ha tenido que recorrer durante años un camino de espinas y recortes, y esto en contra de la opinión de muchos expertos que advertían del riesgo de una contracción de la economía. Esa contracción se produjo y el que ahora haya aflojado no termina de convencer a muchos. La mejora ha tardado demasiado para descartar un simple cambio de ciclo, y la recuperación es todavía lenta y escasa. Igual que en el paseo de 6,3 kilómetros de los mandatarios, que se nos dice que hicieron en menos de una hora, hay una cierta tendencia a jugar con las cifras. Por eso ahora se avecina el debate de si profundizar las reformas o aflojarlas y para esa batalla Merkel necesita aliados. Con un Hollande haciendo equilibrios y una Italia que no se sabe si gira hacia la socialdemocracia o vuelve al populismo, Rajoy se ha convertido en su mejor apoyo en Europa, algo de lo que el presidente español puede sacar partido. Pero ambos necesitan urgentemente que se visualice el «final de camino», y eso es lo que han ido a escenificar entre los eucaliptos de O Pino. O Monte do Gozo, cerca de allí, tiene precisamente esa función: la de animar a los peregrinos agotados mediante la ilusión óptica de que la Catedral está más cerca de lo que parece. Pero no lo está y, si hemos de creer al romance, el pobre Don Gaiferos de Mormaltán todavía murió de agotamiento justo el pie de la catedral. Don Gaiferos era, después de todo, también él un político haciendo el camino de Santiago, y aunque su historia sea leyenda, es un recordatorio de que los últimos kilómetros de un viaje largo son a veces los más peligrosos.